Giuliano hasta 2030. Como Hancko, Baena, Cardoso, Barrios (cuando firme su prolongación) y Julián. Una columna vertebral sellada durante casi un lustro para seguir creciendo. Jugadores en edad de crecer y crecer para hacer más grande a un Atlético que tiene marcada la hoja de ruta en lo económico, la llegada de Apollo como accionista mayoritario, pero también en lo deportivo, con una serie de futbolistas que deben tomar el relevo de los actuales capitanes.
Porque poco a poco el objetivo es que la vieja guardia vaya dejando paso a los jóvenes destinados a liderar el proyecto sobre el verde. Koke, Oblak, Giménez y Griezmann conforman el póker de veteranos y todavía tienen recorrido en el plantel como demuestran las alineaciones de Simeone. El español está viviendo una segunda juventud aprovechando la lesión de Cardoso, el esloveno es intocable desde hace más de una década, el uruguayo vuelve a mostrar su seguridad una vez superada la lesión y el francés es el segundo máximo goleador tras Julián.
Con los cuatro capitanes en vigencia, el escenario es ir dando el testigo a la nueva hornada. De ahí la apuesta hasta 2030 por los jugadores que deben tirar del carro estas próximas temporadas. Algunos, liderados por Julián, ya lo hacen desde que llegaron al club. Otros, como Barrios o Giuliano, se han convertido en indiscutibles gracias a su rendimiento. El más esperado, Baena, empieza a crecer y ser importante una vez que ha superado un inicio complicado por una lesión muscular y la operación de apendicitis que le impidieron estar disponibles desde el inicio del curso.
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El último, Cardoso, está recuperando las sensaciones tras meses lesionados pero se sigue confiando en las cualidades que le llevaron al Metropolitano tras su gran rendimiento en el Betis. Que Koke esté a un gran nivel permite que el norteamericano, que recayó de la lesión del tobillo cuando iba a entrar en el once, se adapte sin una premura que pudiera ser perjudicial.
Sólo Nico y Koke terminan este año
Más allá del núcleo con contrato hasta 2030, son varios los jugadores capitales que también tienen un vínculo más allá de este curso. Oblak y Giménez tienen firmado hasta 2028 (esta temporada y dos más) tras la firma de los últimos contratos en los que ya superan la década como rojiblancos. Llorente, por hablar de otro titular, tiene un vínculo hasta 2027.
Sólo, por ahí, hay dos jugadores entre los que están siendo habituales en el once que tienen que solucionar su futuro el próximo 30 de junio. Uno es el gran capitán, que a este nivel nadie duda de que seguirá un año más porque vive una segunda juventud. El otro, Nico Gonzalez, por el que el Atlético deberá abonar 32 millones en caso de cumplir la cláusula de su cesión de un 60% de partidos de Liga. Estos dos casos son puntuales porque este es un Atlético a largo plazo.