Muchos de los ciudadanos que viven en los Estados Unidos están pasando por momentos dramáticos en lo económico durante este 2025. Según un análisis del Instituto del Bank of America, el 24% de los hogares vive al día, dedicando más del 95% de sus ingresos a cubrir las necesidades básicas como vivienda, alimentos, cuidado infantil y servicios públicos.
Esto quiere decir que un pequeño porcentaje de estos hogares, un 5%, se destina exclusivamente a situaciones relacionadas con el tiempo libre, como pueden ser, por ejemplo, salir a cenar o irse de vacaciones. Ya lo de ahorrar resulta en estos momentos una utopía para este perfil de ciudadanos.
«El número de hogares de bajos ingresos (especialmente quienes pertenecen a la generación milenial y generación X) que viven al día sigue aumentando, mientras que el número de hogares de ingresos medios y altos prácticamente no aumenta», se puede desprender del estudio de Bank of America.
Tal y como recogen sus datos, un mayor número de hogares de mediana edad, como los de la generación milenial y la generación X con menores ingresos, son quienes han experimentado los mayores crecimientos en su presión financiera. Según los responsables del análisis, esta tendencia «es probable que se deba a la desaceleración del crecimiento salarial en este grupo».
En consecuencia, estos grupos de mayores ingresos «son más capaces de absorber la reciente reactivación de la inflación debido a su considerable crecimiento salarial, mientras que el crecimiento salarial de los hogares de menores ingresos no ha seguido el mismo ritmo», concluye el informe.
Una economía en forma de K
El informe presentado por Bank of America evidencia una economía estadounidense en forma de K: mientras un grupo de personas aumenta su poder adquisitivo, otro más numeroso se ha estancado en su progreso o incluso está perdiendo su bienestar material.
«Los hogares de ingresos altos y bajos están viviendo en dos mundos distintos»
En este sentido, aunque apenas hubo cambios para los hogares de ingresos medios y altos, el porcentaje de los de ingresos bajos que viven de nómina en nómina aumentó del 27%, en 2023, al 29%, según se desprende del informe. «Los hogares de ingresos altos y bajos están viviendo en dos mundos distintos», avisan.
«Trabajamos a tiempo completo y tenemos títulos universitarios. Y no avanzamos nada», confiesa Austin, un joven de 34 años estadounidense, en un reportaje para la CNN. «Tener 34 años y vivir de nómina en nómina sin ahorros… las cosas están bastante mal ahora mismo», señaló. «Queremos tener una casa y formar una familia, pero no sé cómo lograremos estabilizarnos», afirmó.
WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky