Cuando Denzel Washington estaba en la cúspide de su carrera, le llegó el guion de Seven, el thriller criminal de un desconocido David Fincher. El productor de la película era el representante de Washington, así que Fincher pensó que sería fácil conseguir que el actor de Malcolm X protagonizara esta historia. Sin embargo, rechazó el papel por los que muchos actores matarían, pese a que el guion fue reescrito varias veces para adaptarse a sus peticiones.

«Me dijeron que Denzel había leído el guion, que no le había gustado y que luego lo reescribieron como diez u once veces para adaptarlo a él. Lo reescribieron hasta la saciedad, hasta el infinito, en un intento de que Denzel dijera que sí. Pero cuando me involucré en el proyecto, Denzel ya lo había dejado hacía mucho tiempo», dijo Fincher en Independent.

Washington dijo que el guion de Seven era «demasiado demoníaco»

Seven tenía un argumento muy oscuro, más allá del final que lo convirtió en un rotundo éxito. Denzel Washington le reconoció a Jamie Foxx que el guion de Seven era «demasiado demoníaco», pero después se dio cuenta de su error al rechazar el papel. «Querían que interpretara el papel de Brad Pitt. Pensé que el guion era demasiado demoníaco. Luego vi la película y pensé: ‘Oh, la fastidié‘», explicó.

No es la primera vez que Washington rechaza un papel, casi descartó hacer Training Day para no dañar su buena imagen al interpretar a un villano. No obstante, el tono de Seven fue demasiado para la fe del actor que suele verse en otros trabajos como la propia Training Day, donde añadió una cita biblíca. Años después, ha mostrado su arrepentimiento y considera que fue un error rechazar el papel.