Lo que debía haberse jugado en Pisuerga se disputó en el Lydia Valentín. A pesar de estar fuera de su hogar, los de David Barrio ofrecieron una buena imagen en la primera parte en Ponferrada, pero esta contrarrestó con lo visto en el segundo acto. Los locales se llevaron el gato al agua tras una muy mala segunda parte de los pucelanos en la que solo anotaron 25 puntos. A base de triples (13) Ponferrada sacó del partido a un CBCV que dejó lanzar muy liberados a los jugadores bercianos. Sobrepasados y sin ideas en ataque así llegó el primer varapalo de un conjunto vallisoletano que ya no está invicto.

El UEMC CBC Valladolid empezó anotando por medio de Haney, pero no entró bien al encuentro. La canasta de Callahan junto a los triples de Rubén Salas y Sergio Romero llevaron la desventaja inicial hasta el 8-2. Los de Barrio estaban bien en el rebote defensivo, pero no tanto en el ofensivo y el acierto de cara al aro era discreto. Orri hizo el 10-4 y las imprecisiones en ataque eran constantes. Tras una sucesión de canastas por parte de ambos equipos a los visitantes les tocaba remontar desde el principio, ya que la desventaja de seis puntos era constante. Y lo hicieron.
Hanna anotó sus dos tiros libres para acercar a los visitantes en el marcador. Y ahí entró el papel del tirador, un Ice Haney que sacó su muñeca a pasear para poner el 18-15 y seguir remando a contracorriente. Dos canastas seguidas y sobre todo varias defensas exitosas hicieron que una bandeja de Edu Arqués pusiera a los pucelanos por delante por segunda vez en el encuentro. Duró poco la alegría porque un triple de Bergens devolvió la ventaja leonesa, pero Isern acertó desde la línea de tiros libres para devolver la igualdad y mandar el partido a la primera tregua con 21-21.
Igualdad, pero mínima ventaja pucelana
El encuentro marchaba con la misma igualdad que el duelo copero en el que Isern fue el héroe y el CBC se impuso de uno, pero la incógnita era si el CBC iba a continuar igual. Haney volvió a dejar frío al Lydia Valentín con otro triplazo para el 23-26 y la máxima ventaja pucelana en el duelo regional. Esto no haría más que incrementar, ya que un inspirado Ordóñez anotó una bandeja y un dos más uno para llevar el marcador al 23-31 y un parcial de 2-10 en el segundo cuarto para los vallisoletanos.
Rubén Salas anotó un triple muy liberado que acercaba a los suyos a cuatro en el luminoso, pero Pablo Martín impuso su ley desde la línea de tiros libres para el 30-37. La ventaja de hasta ocho puntos se esfumó por completo. Dos canastas seguidas de Orrit y una de Sima apretaron el partido, 36-38 y un duro palo al pasar de +8 un nuevo triple solo de Bergens que puso otra vez por detrás, 39-38 a los del Pisuerga. Un parcial de 18-7 muy sonrojante en apenas cinco minutos, que llevó el choque con máxima igualdad al descanso, 41-42.
Debacle en cinco minutos
El segundo acto empezó como el primero, con un triple de Romero y otro de Salas para marcar territorio y poner otra vez el +5 a su favor. Las anotaciones se sucedían y el mayor castigo posible estaba en la línea de tres, donde Romero volvió a mostrarse letal, 54-50. Nublados en ataque, pero inspirados en el rebote defensivo los pucelanos se mantuvieron vivos en el partido esperando su momento, que nunca llegó. Arqués y su veteranía junto a la velocidad de Isern volvieron a dar oxígeno a los suyos, 58-55.
La línea de 6,75 volvió a atizar con dureza al Valladolid. Sima anotó un nuevo triple para poner el 63-55, vuelve a tener que pararlo Barrio. Bergens y Cera encestaron otros dos lanzamientos de tres consecutivos para el 70-57 y la máxima ventaja del encuentro. El UEMC tenía que levantar 13 puntos de desventaja tras un mal tercer cuarto (29-15 en contra).
Último cuarto de sonrojo
La sangría iba a ser aún peor porque los de Barrio no se encontraban y el marcador llegó a ser de 76-58, parcial de 6-1 en tres minutos y medio del último cuarto. Orrit llevó la desventaja hasta los 21, Sima hizo lo propio para que el castigo se convirtiera en penitencia, 82-58 y un balance de 13 de 29 triples para los bercianos por tres de 18 para los vallisoletanos. Dato que lo dice todo.La comodidad del resultado llevó a varias canastas fáciles del UEMC que maquillaron algo el resultado final con la primera derrota del curso para los de Barrio, 89-67.
Ponferrada 89; CBC Valladolid 67
- Ponferrada: Orrit (16), Bergens (11), Treviño (6), Efambe (8), Romero (9), Salas (9), Cera (10), Hayes (10) y Sima (10).
- UEMC Baloncesto Valladolid: Taiwo (2), Hanna (11), Haney (8), Marín (8) y Ordóñez (11) -quinteto inicial- García-Abril (2), Isern (14), Martín (5), Arqués (6) y Hansen (-).
- Árbitros: Gallego y Pérez.
- Parciales cada Cuarto: 21-21; 20-21 (41-42; descanso); 29-15 y 19-10 (89-67; final).