El regreso de Dani Díez a las pistas después de dos partidos ausente por una lesión en un dedo de una mano fue una de las mejores noticias para un Recoletas Salud San Pablo Burgos que cayó ante el Andorra en un partido que dolió mucho. El propio ala-pívot repitió tras el partido que «hay que hacer autocrítica» porque «no es suficiente, ya se está viendo», aseguró herido.

«Sabíamos que nos jugábamos mucho, era un partido importante en casa, pero la ACBes así de dura, ya lo sabemos. Tenemos que estar más preparados, hay que hacer autocrítica todos porque debemos de ganar en intensidad al rival y no ha sido así. En un cara o cruz ha salido cruz. Felicito al rival pero hay que hacer autocrítica para los siguientes partidos», repitió Dani Díez, que terminó el duelo con 21 puntos (3/4 en tiros de dos y 5/9 en triples) en la que fue, sin lugar a duda, su mejor actuación de la temporada.

En su análisis, el veterano jugador señaló que «debemos de salir mejor y ser más fuertes con el apoyo de nuestra gente», aunque recordó que «queda mucho y no hay que bajar los brazos». Por ello, se propuso «volver el lunes a trabajar al máximo» antes de visitar al Breogán el sábado.

Siguiendo esa línea de tranquilidad y confianza, afirmó que «esto lo vamos a sacar todos juntos» y que «hay que hacer más equipo que nunca para que llegue la segunda victoria cuanto antes». Y de nuevo reconoció que el último partido antes del parón internacional es de suma importancia:«Ya lo eran hasta ahora, pero con esta derrota cada partido es una final. Breogán es otro equipo que juega bien en casa y que se está jugando mucho, pero tenemos que ir allí con otra mentalidad. Vamos a trabajar bien fuerte», cerró.

Su lesión. Respecto a la inflamación en la cápsula articular del dedo meñique que le impidió jugar ante Valencia y Tenerife, Díez aseguró que está mucho mejor:«Es una lesión fastidiada porque el dedo me duele en cada contacto, pero es mucho menor que al principio y me permite jugar. Poco a poco se curará por completo», expresó.