© Yumeng Zhu
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https://www.archdaily.cl/cl/1035713/restaurante-luxeisland-dl-atelier
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Área
Área del proyecto de arquitecturaÁrea:
200 m² -
Año
Año del Proyecto de arquitecturaAño:
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Fotógrafos
© Yumeng ZhuDescripción enviada por el equipo del proyecto. A principios de 2023, LUXELAKES planeó lanzar un nuevo proyecto en Wuhan. Habiendo colaborado en múltiples proyectos anteriores, como el Museo Infantil Dotsss, la Arquitectura de Edenland y la Planificación de CPI en Chengdu, así como el Distrito Comercial CAPE y la Planificación de la Calle Histórica Qilou en Hainan, ya estábamos familiarizados entre nosotros y trabajamos juntos sin problemas. Como resultado, colaboramos nuevamente para diseñar un restaurante dentro de un parque infantil. Durante la fase de planificación preliminar, el restaurante fue nombrado «La Cabina Valiente», ya que estaba rodeado de desafiantes equipos recreativos de escalada. Esperábamos que el edificio inspirara el coraje de los niños para superar dificultades. Con un área interior de menos de 200 metros cuadrados, el edificio tiene una huella relativamente pequeña. Nuestro objetivo era crear amplios espacios semi-exteriores donde los visitantes pudieran relajarse a la sombra. Además, gracias a su ubicación prominente en la entrada de la isla, el edificio es visible desde la distancia para los visitantes que llegan.
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© Yumeng ZhuEn ese momento, a menudo leía los poemas del poeta de la Dinastía Song del Sur, Jiang Jie, y me sentía particularmente atraído por sus expresiones directas pero vívidas. Hay una ligereza indescriptible y un peculiar encanto en ellos. Mientras trabajaba en este diseño, fui más o menos influenciado por esta forma directa de expresión. Sin pensar demasiado, simplemente quería crear una montaña—una pequeña montaña danzante.
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Sección
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¿Cómo puede hacerse bailar una montaña? Recordé dos pinturas: «Danza» de Henri Matisse, creada cuando tenía 40 años, y «Mil Li de Ríos y Montañas» de Wang Ximeng, pintada cuando tenía solo 18. Busqué capturar la vitalidad y el espíritu juvenil que encarnan estas obras—ya sea a través de la imitación formal o de una comprensión intuitiva de su esencia—y, en última instancia, traducirlo en un espacio arquitectónico. Luego integramos consideraciones de disposición del sitio, requisitos funcionales, escala, métodos de construcción y materiales en este diseño. Más importante aún, ajustamos la relación entre símbolos visuales y percepción física, lo que llevó a la realización del diseño arquitectónico—incluso dos diseños.
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© Yumeng ZhuEl primer diseño planeaba usar paneles de cobre oxidado, mientras que el segundo utilizaba tiras de madera maciza. Sin embargo, el primer diseño involucraba extensas superficies de doble curvatura, lo que lo hacía muy costoso. Por lo tanto, el segundo diseño, que utilizaba superficies completamente planas, fue finalmente seleccionado. Como uno de los primeros edificios independientes en abrir en LuxeIsland, este edificio sirve como una vitrina para LuxeIsland. En consecuencia, la disposición se curva suavemente y se extiende a lo largo de la costa de la isla, mientras que la altura del edificio fue diseñada con tanta masa que permanece visible desde el otro lado del río a través de los huecos en el follaje. A medida que los visitantes caminan por el césped y se deslizan a través del bosque, acercándose gradualmente al edificio, la «pequeña montaña» destaca prominentemente, invitándolos a explorar más.
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© Yumeng ZhuA medida que los visitantes caminan por una pendiente cubierta de hierba, la estructura se despliega de repente ante ellos—masivos volúmenes de madera maciza flotando sobre el suelo, con pirámides triangulares uniendo manos, balanceándose y danzando. Los niños estarán emocionados al ver esta forma colosal, corriendo hacia el techo voladizo que se extiende por más de diez metros. El edificio, que recuerda a una nave espacial lista para despegar, eleva una vez más tanto el estado de ánimo como la sensación de los visitantes a un clímax. Los padres que siguen a sus hijos disfrutan de un tiempo de ocio, charlando bajo los aleros, que se extienden como un árbol gigante. Con sus hijos corriendo y jugando frente a ellos, los padres ocasionalmente los llaman para que descansen y tomen un trago. Detrás del vidrio completamente transparente, el restaurante y el bar de agua también están llenos de actividad.
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© Yumeng ZhuPara hacer que el techo en capas, similar a una montaña, parezca como si estuviera saltando del suelo, la estructura principal del edificio está soportada por cuatro grupos de columnas de acero compuestas. Estas columnas están revestidas con paneles de piedra negra, con partes del revestimiento extendidas para formar características funcionales como asientos al aire libre, mostradores de comida para llevar y estaciones de lavado. El techo adopta una estructura de marco espacial de acero para lograr grandes luces y voladizos. Su exterior completo está revestido con tiras de madera maciza, que están intercaladas con aberturas triangulares que también albergan iluminación interior y conductos de aire acondicionado. Equipos grandes, como sistemas de cocina y HVAC, están completamente ocultos dentro de la estructura del techo.
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© Yumeng ZhuDurante la fase de diseño, inicialmente imaginamos la estructura del techo como una terraza en la azotea para aumentar la capacidad de asientos en el comedor y enriquecer las experiencias espaciales. Sin embargo, este concepto fue abandonado posteriormente debido a consideraciones operativas. No obstante, se preservó la forma del techo, ya que la funcionalidad no se define únicamente por la accesibilidad física. La experiencia visual y la jerarquía espacial general del parque son igualmente integrales al valor funcional de un espacio.
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© Yumeng ZhuNosotros, los humanos, somos inherentemente incompletos, dependiendo de herramientas de terceros para complementar nuestras capacidades. Por ejemplo, necesitamos zapatos para correr, palillos para comer, coches para viajar más rápido y computadoras para mejorar nuestro pensamiento—estas extensiones aparentemente funcionales nos ayudan a volvernos «humanos». De manera similar, nuestras mentes no son autosuficientes; necesitamos nobleza, humildad, dignidad y coraje, que también dependen de apoyo externo—como la música y el arte. De la misma manera, la arquitectura cumple este mismo propósito: ayudarnos a ser más completos como individuos.
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© Yumeng ZhuPara mí, el enfoque de este diseño se inclina más hacia lo último y está impulsado por la «intuición somática» de las personas. Primero, cuando percibimos inicialmente la forma de la «pequeña montaña», recuerdos y emociones inherentes son evocadas instintivamente por este símbolo, llevándonos a un contexto de naturaleza e inocencia infantil. Luego, a medida que nos acercamos al edificio, su volumen sustancial, postura dinámica y forma inusual involucran nuestros sentidos físicos, sumergiéndonos en un estado de emoción y actividad. En tal estado, los vacíos internos dentro de la psique humana se amplifican—los niños pueden volverse más valientes, corriendo hacia las estructuras de escalada para explorar y desafiarse a sí mismos a través del juego. Esto, quizás, es el verdadero significado de la Cabina Valiente.
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