Italia es una fiesta cuando se juega al tenis. Un país de tradición y torneos que se ha volcado definitivamente en la actual era dorada, masculina y femenina. Lleno en Turín para ver el éxito de Jannik Sinner en las ATP Finals, ni una entrada libre en Bolonia para ver la defensa de la Copa Davis, que el país ganó consecutivamente en 2023 y 2024.
Esta vez sin el líder, Jannik Sinner, como tampoco el otro top-10, Lorenzo Musetti, ambos ídolos en la Copa de Maestros. Pero el fondo de armario del grupo transalpino da para mucho. Y entró en acción un antiguo finalista de Wimbledon, un jugador que sería top de no ser por las lesiones.
Sin Sinner y Musetti, emergió otro hombre fuerte, ya pieza imprescindible en Málaga 2024. Matteo Berrettini, 29 años y nº 56, dio la cara en la apertura de la eliminatoria de cuartos de final entre Italia y Austria. Puso el 1-0 batiendo al zurdo austríaco Jurij Rodionov por 6-3 y 7-6 (4) en 1h.46′.
El romano es un seguro de vida con la selección. Séptima victoria consecutiva en la Copa Davis, tras el 6-0 del curso anterior. Remontó un 2-4 en la segunda manga. Ejerció de veterano ante su afición, doblegando como debía a un jugador teóricamente de nivel inferior. Aunque en esta competición el ranking puede ser traicionero.
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Berrettini cumplió, son 10 individuales ganados de 12 en este torneo. Aplacó a Rodionov, héroe austríaco ante Hungría en la calificación. Espera en semifinales Bélgica. Italia dispondrá de la primera oportunidad de clasificarse a través de Flavio Cobolli, que se las verá con Filip Misolic en la confrontación entre números uno de los equipos.
El encuentro sufrió un parón de un cuarto de hora en los comienzos del segundo set debió a un problema con las luces cenitales del SuperTennis Arena, como se ha rebautizado para la ocasión a un pabellón de la Feria de Bolonia.