Remco Evenepoel apunta alto para 2026. El belga, nuevo estandarte del Red Bull-BORA-Hansgrohe, quiere acercarse por fin al nivel casi inalcanzable que Tadej Pogacar exhibió durante toda la pasada temporada. Sabe que la diferencia ha sido enorme, pero también que, después de dos años marcados por caídas, lesiones y preparaciones incompletas, puede volver a su mejor versión.

En una conversación con Het Laatste Nieuws, Evenepoel explicó que su plan pasa por un invierno sin sobresaltos y un trabajo muy concreto: “Necesito volver a entrenar en intensidades máximas. Hace tiempo que no puedo hacerlo de manera continuada y eso me ha frenado. Si encadeno meses limpios, sé que puedo dar dos o tres pasos adelante respecto a 2025”. Y dejó claro que no rehúye el reto: “Las derrotas solo me empujan más. No soy de buscar caminos fáciles y no voy a esquivar a Pogacar en 2026”.

El belga también desgranó, desde su experiencia directa, qué hace tan especial al campeón del mundo. “En el Europeo y en Lombardía me pegaba a su rueda cuando arrancaba. Él mete un cambio brutal, sostiene cinco minutos de pura brutalidad… y cuando afloja sigue moviendo números por encima de su FTP. Ese es el salto que marca la diferencia”, admitió, consciente de que igualar ese nivel es la gran obsesión de su próximo curso.