Sonriente y abrigada, Elena Ochoa, Lady Foster por matrimonio, vivió un gran día este martes en la capital de España junto a su marido, el prestigioso arquitecto Norman Foster, nombrado Doctor Honoris Causa en la Autónoma de Madrid.
A las doce de la mañana, la pareja llegaba a Universidad madrileña en coche, acompañada por el embajador de Reino Unido en Madrid, Alex Ellis, para estar junto al creador de Manchester en un día tan señalado.
Elena OchoaJose Ignacio Viseras.
A sus 90 años, emocionado, vestido con unos llamativos calcetines rojos, y con su esposa pendiente de él en todo momento, Norman Foster tuvo un entrañable día, que queda para el recuerdo, en Madrid. Dio un discurso en inglés, agradeciendo mucho la distinción recibida, en el salón polivalente de la Universidad Autónoma, donde le impusieron el birrete de Doctor. Una cita que no duró más de una hora.
Norman Foster con calcetines rojosGTRES
Un acto solemne en el que reconoció a Lord Foster como algo más que un brillante arquitecto. Lo premian por ser como un filósofo, un pensador, que comunica sus ideas con sus diseños. Acudieron solos, sin sus dos hijos.
El look
Elena Foster lució un traje pantalón de cuadros en tonos verdes con pantalón muy ancho y gafas de sol grandes. Llamó la atención su collar de perlas gigantes en tono dorado. Para combatir el frío, la española lució una bonita bufanda morada y verde.
Norman Foster en MadridGTRES
Foster, Presidente de la Norman Foster Foundation (NFF), fue investido en una ceremonia que situó en el centro el humanismo y la importancia de construir un mundo mejor a través de nuestras acciones. La ceremonia fue presidida por la rectora de la UAM, Amaya Mendikoetxea, y contó con la asistencia de una amplia representación de la comunidad universitaria.
Norman Foster y Elena Ochoa en MadridGTRES
Este reconocimiento —la más alta distinción académica de la institución— ha sido concedido a Foster por su «capacidad para imaginar espacios que dignifican la vida», su «perspectiva profundamente humanista sobre la forma en que habitamos el mundo» y porque «su obra es una lección de humanidad», tal como señaló la rectora en su intervención.
La rectora impuso a Lord Foster los símbolos que acompañan la más alta distinción académica de la Universidad: el birrete laureado, el anillo universitario, los guantes blancos y el Libro de la Ciencia.