- Nuevo golpe a Elon Musk: la NASA cancela el Starship para volver a la Luna
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Una filtración interna de SpaceX ha puesto de manifiesto un serio contratiempo para el programa lunar de la NASA, ya que el documento revela que el sistema Starship no podrá cumplir los plazos marcados para Artemis III. Esta información deja a Elon Musk frente a un desafío técnico que podría aplazar de nuevo el regreso tripulado a la superficie lunar, un aspecto crítico en un momento de creciente competencia internacional.
El archivo, hecho público por Politico a través de la periodista Audrey Decker, establece que SpaceX prevé un aterrizaje con astronautas en septiembre de 2028, una fecha significativamente posterior al objetivo de mediados de 2027 fijado por la NASA. De acuerdo con el documento, las pruebas esenciales del proyecto incluyen el repostaje en órbita para junio de 2026 y un alunizaje no tripulado previsto para junio de 2027, maniobras que deben completarse sin incidentes para avanzar hacia la fase tripulada.
Retrasos acumulados
La nave Starship continúa acumulando aplazamientos debido a la complejidad de sus componentes y a la necesidad de demostrar capacidades avanzadas, como el retorno seguro a la Tierra y el funcionamiento del repostaje orbital. Durante el último año, el vehículo ha experimentado varios fallos en pruebas clave, lo que ha generado dudas sobre su fiabilidad para una misión tan exigente como Artemis III, cuyo objetivo es trasladar astronautas desde la órbita lunar hasta el satélite.
SpaceX’s new tentative schedule for HLS, per internal document I obtained:
– Prop transfer June 2026
– Uncrewed lunar landing June 2027
– Crewed lunar landing Sept 2028First in POLITICO Pro space newsletter👇 pic.twitter.com/AY5O9vFACv
— Audrey Decker (@audrey_decker9) November 14, 2025
La situación ha provocado que la agencia espacial estadounidense considere alternativas para garantizar la continuidad del programa. Semanas atrás, el administrador interino Sean Duffy declaró que la institución estaba dispuesta a estudiar nuevas opciones para el módulo de aterrizaje, afirmando: «Las grandes empresas no deberían tener miedo a los desafíos«. Sus palabras abrían la puerta a una competencia más intensa dentro del programa Artemis.
Una situación tensa
Las declaraciones de Duffy no fueron bien recibidas por Musk, que respondió en redes sociales con críticas dirigidas al responsable de la agencia, a quien calificó como «Sean Dummy» (dummy puede traducirse al español como «tonto» o «inútil») antes de añadir: «La persona responsable del programa espacial estadounidense no puede tener un coeficiente intelectual de dos dígitos». Estos mensajes generaron un notable impacto mediático y evidenciaron el clima de tensión entre ambas partes en un momento clave del proyecto lunar.
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R. Badillo
Mientras tanto, la compañía Blue Origin continúa trabajando en su módulo Blue Moon, que se perfila como alternativa para las futuras misiones de alunizaje. Aunque la empresa mantiene un perfil discreto, se espera que realice una prueba espacial durante la primera mitad del próximo año, lo que la posicionaría como una opción viable ante posibles cambios en la planificación del programa Artemis.
La combinación de retrasos técnicos y diferencias estratégicas ha obligado a la NASA a replantear el avance del programa lunar, que ya experimentó aplazamientos en fases previas por cuestiones relacionadas con el traje espacial y el escudo térmico de la cápsula Orion. En este escenario, la posibilidad de ampliar la colaboración con empresas como Blue Origin cobra mayor relevancia, especialmente ante el ritmo cada vez más acelerado de la exploración espacial china.