Vuelve el Casademont tras el parón y, en palabras de Fingall, lo hace con la máxima ambición. La americana es exigente y considera que el Casademont puede ser «más consistente» porque si lo consigue «somos un equipo muy peligroso que tiene que llegar a las finales». La ala-pívot habla de su adaptación al club y a la ciudad y prioriza el decisivo duelo ante el Mersin, mostrando una tremenda ilusión, aunque esté complicado, por llegar lo más lejos posible en la Euroliga.

¿Qué tal les ha sentado el parón a nivel físico y mental?

Era necesario para mí este descanso largo, ahora vamos con las pilas cargadas. Es genial poder volver a estar todas las compañeras juntas y ahora estamos volviendo a poner el foco en lo colectivo.

El inicio de curso ha sido verdaderamente exigente. ¿Qué balance haces de estos primeros meses?

Sí, han sido muchos partidos seguidos y de mucha intensidad. Creo que ha habido momentos en los que se ha visto nuestro potencial y el equipo que podemos ser. También momentos en los que ha habido altibajos. Creo que podemos ser más constantes, sobre todo en defensa. Somos un equipo defensivo: si nuestra defensa es buena, somos muy buenas. Estoy contenta con el equipo, con lo que hemos mostrado y con a dónde creo que podemos llegar.

¿Qué nota le pone hasta ahora a la temporada?

Mmmmm… (piensa durante un buen rato) un 7,6. Siempre hay espacio para crecer. En la Euroliga creo que podríamos haberlo hecho mejor, ahí pequeños detalles nos costaron partidos.

Conocía al Casademont como rival. Ahora, como parte de él, ¿qué destacaría del club?

Tenía amigas en el equipo y me habían contado cosas buenas. Vivirlo como jugadora es muy especial. El club es increíble, cuida mucho a las jugadoras y le da mucha importancia a la sección femenina. Además, la afición es increíble y especial.

Cuando en su primer partido en la República Checa se vio 35 puntos abajo, ¿sintió que podía haberse equivocado con su fichaje?

No, en ningún momento. Creo en Dios y recé mucho para tomar la decisión de venir aZaragoza. Estoy donde tengo que estar, incluso en los momentos duros. Aunque hubiéramos caído eliminadas no me hubiera arrepentido.

Después llegó la remontada en el Felipe. Vaya partido para sentir por primera vez el apoyo de la ‘Marea Roja’

Fue un día muy especial. Mi primer partido en el Príncipe Felipe fue un sentimiento muy diferente. Era un partido muy importante, extremadamente importante. Fue una locura ver a la afición en su mejor versión. No voy a olvidar esa experiencia. Los aficionados son siempre importantes, pero siento que aquí lo son todavía más. Nos dan mucho y para nosotras es emocionante sentir esa conexión.

Después, la Supercopa. En Valencia estaba acostumbrada a ganar títulos, aquí en Zaragoza no es tan habitual.

Bueno, sí que se celebró más, pero para mí así es perfecto porque no quiero que eso se convierta en algo normal para mí. Estoy agradecida de haber podido ganar muchos títulos con Valencia y espero seguir ganando más con el Casademont.

A nivel personal, ¿está contenta con lo que se está viendo de Nadia Fingall en Zaragoza?

Sí. Soy muy dura conmigo misma y siempre quiero hacer más, pero creo que estoy haciendo cosas buenas para el equipo. Me cuesta estar satisfecha del todo porque siempre hay cosas que se pueden mejorar, pero intento mantenerme positiva.

Quizá en el acierto exterior es donde no se le ha visto tan fina como acostumbra

Lo sé, mis porcentajes son un poco más bajos que en otras temporadas, pero Carlos y mis compañeras confían en mi tiro. Yo siempre tengo la mentalidad de que el próximo lo meteré.

¿Qué vestuario se ha encontrado a nivel humano?

Conocía a muchas de mis compañeras y eso lo hace más fácil. Somos un equipo muy bueno dentro y fuera de la pista. Creo que nos cuidamos mucho. Nos llevamos muy bien y espero que eso se note cuando estamos en la pista.

En lo deportivo, ¿cuál de sus compañeras le ha sorprendido más?

Diría que Aminata (Gueye). Como jugaba en Francia, no la había visto mucho. Es joven, tiene un gran juego de pies, una gran técnica y mucha habilidad.

Y a Carla Leite, ¿cómo la está viendo?

Es una jugadora increíble. Juega en la WNBA, fue MVP de la Eurocup… pero además es muy buena persona. Vino justo tras su temporada para estar con nosotras y eso muestra su compromiso. Es tremendamente talentosa. A veces ves las cosas que es capaz de hacer y solo te queda decir…’sigue así, increíble’. Es genial jugar poder jugar con ella.

El gran valedor de su fichaje fue Carlos Cantero y su confianza en ti es máxima. ¿Cómo es trabajar con él?

Sí, es genial tener un entrenador que confía tanto en ti. La gente ve cómo es en los partidos con nosotras y piensa que es así siempre, pero no. Es una gran persona y se preocupa por sus jugadoras. También sabe lo que necesitamos para tener éxito y nos mantiene responsables. Ese equilibrio es muy bueno.

¿Qué es lo que está pasando en la Euroliga?

Son partidos muy exigentes en los que no puedes fallar. Para mí, el problema ha estado en la defensa. En algunos momentos ha faltado comunicación, agresividad y exigencia. La defensa debe de ser lo primero.

Como interior, le debo preguntar por los problemas en el rebote. ¿Se puede mejorar en lo colectivo o es una cuestión individual?

Sí, es una cuestión en la que sabemos que podemos estar mejor. Estamos trabajando en ello, pero también el deseo empieza por cada jugadora.

Juegan el domingo ante el Estepona, pero el foco está en el Mersin.

Va a ser una lucha por nuestras vidas. Sabemos que es muy importante y vamos a darlo todo. No hay otra opción.

Qué preferiría, ¿perder por seis puntos y pasar a la segunda fase de la Euroliga con dos victorias o hacerlo por más e intentar ganar la Eurocup?

No es una pregunta fácil. Quiero seguir en la Euroliga y que los mejores equipos de Europa tengan que venir a Zaragoza. Creo que podríamos intentar ese milagro. Será difícil, pero tendríamos nuestras opciones.

Suena ambicioso. Otra. ¿Jugar la ‘Final Six’ en Zaragoza o ganar la Copa de la Reina?

Para mí, llegar a la Final Six. Sabemos cómo hemos empezado, pero aún tenemos una oportunidad. Jugarla aquí en el Príncipe Felipe, el ambiente que se respiraría sería muy especial para nosotras y para toda la ciudad. La viví aquí el año pasado con el Valencia y vino gente a vernos y ya fue increíble, pero con todo el pabellón animándonos sería otra cosa. Algo mágico.

En España, ¿considera al Casademont favorito para ganar Copa y Liga?

Me da igual si somos favoritas o no, pero estoy convencida de que vamos a pelear por ello. Tenemos que llegar a las finales. Si somos consistentes, somos un equipo muy peligroso.

¿Qué le está pareciendo Zaragoza como ciudad?

Me gusta mucho porque es grande, pero tiene el espíritu de una ciudad pequeña. La gente es muy amable. Ahora ha empezado el invierno y estoy pasando un poco de frío, pero tengo chaquetas suficientes (ríe).

Solo firmó un año de contrato. ¿Seguirá la temporada que viene en el Casademont?

La temporada es larga, vamos día a día. Zaragoza. Tener aquí en 2027 la Final Six, la Copa… están haciendo mucho por el baloncesto femenino. Vamos a ver, pero este es un buen sitio. n

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