La Policía Nacional se ha visto obligada esta tarde a disparar contra un joven de 18 años tras abalanzarse sobre varios agentes armado con un cuchillo. Los hechos, que han tenido lugar en el número 69 de la calle Peña de Atalaya (en el distrito … de Puente de Vallecas), se han desatado tras la llamada de alerta del propio hermano del herido. A eso de las 16.45 horas, los servicios de emergencia eran requeridos ante la presencia de este sujeto en el interior del domicilio familiar, con un arma blanca entre las manos y con las facultades mentales totalmente alteradas fruto de la posible ingesta de drogas.

Así, agentes del Cuerpo Nacional y Municipal se han desplazado de inmediato hasta la vivienda para tratar de controlar la situación. A su llegada, ningún familiar se encontraba ya dentro, a excepción de este individuo, de origen magrebí, quien mantenía una actitud totalmente agresiva. Tal era la gravedad, que al abrir la puerta, un agente municipal y otro nacional han hecho uso de sus pistolas táser para intentar reducirlo. Pero el impacto de las descargas sobre su cuerpo ha sido en balde, seguramente por los efectos de las sustancias consumidas.

Tras ello, el sujeto ha cerrado la puerta de nuevo, por lo que los funcionarios presentes han solicitado refuerzo de las Unidades de Intervención Policial (UIP), los cuales al personarse han llamado en reiteradas ocasiones para tratar de que saliera de la casa y se entregara. La respuesta en cualquier caso ha sido negativa, por lo que al percatarse de que la violenta escalada iba a mayores, han tomado la determinación de entrar.

Los miembros de la UIP han reventado la puerta y al acceder se han visto sorprendidos por el joven, que se ha tirado sobre los agentes cuchillo en mano con la intención de clavárselo. Una acción que ha provocado la reacción de los intervinientes, los cuáles han disparado contra el agresor ante la imposibilidad de frenarlo por otros medios. Ha recibido tres impactos de bala, uno en la zona renal, otro en el tórax y un último en la cadera.

Rápidamente, los efectivos policiales han taponado las heridas y han dado aviso a los facultativos de Samur-Protección Civil. Los médicos le han logrado estabilizar, antes de trasladarlo en estado grave al hospital Gregorio Marañón. La zona ha sido acordonada, mientras buena parte del vecindario se preguntaba lo que había pasado, en un enclave del barrio de San Diego azotado desde hace años por los narcopisos y el trapicheo de droga.