Florentino Pérez ha pisado el acelerador de la reforma del Real Madrid para dar entrada a capital privado, sin comprometer el control de los socios. El presidente ha anunciado la convocatoria de una asamblea extraordinaria en las próximas semanas en la que se planteará a los socios compromisarios una reforma estatutaria que, tras su aprobación en referéndum, «pondrá en valor» al club con la entrada de capital privado y otorgaría «derechos económicos» a sus socios actuales. El objetivo es combinar la tradición asociativa del club con la necesidad de captar nuevos recursos para sostener su competitividad global en un escenario deportivo y financiero cada vez más exigente.
El presidente ha confirmado que el proyecto se apoyará en la creación de una filial mercantil vinculada al club, que permitirá la entrada de un inversor externo con una participación minoritaria, de entre un 5% y un 10%, sobre el que el club conservaría la opción de recompra. Pérez ha deslizado que el primer movimiento sería de un 5%, estimado en unos 500 millones.
La arquitectura jurídica procurará garantizar que los inversores no participarán en la gobernanza del club ni tendrán derecho a dividendos inmediatos -aunque sí a retornos a medio plazo-, preservando así el control efectivo de los socios. Para habilitar esta fórmula, el Real Madrid impulsará una reforma estatutaria que deberá aprobarse en una asamblea extraordinaria en las próximas semanas donde se convocaría un referéndum a los socios para 2026, un paso indispensable para dar cobertura formal a la entrada de capital privado.
Si bien el presidente ha reivindicado la «unidad» en la Junta Directiva respecto al proceso, lo cierto es que la decisión se produce tras meses de debate interno entre los equipos jurídico y financiero. José Luis del Valle, abogado del Estado y secretario general, defendió la necesidad de someter la operación a un referéndum para blindarla desde el punto de vista legal, mientras que Anas Laghrari, asesor financiero de máxima confianza del presidente, puso sobre la mesa la fórmula de una filial mercantil, que podría consumarse sin referéndum, para avanzar con rapidez en los contactos preliminares con inversores internacionales.
Finalmente, Pérez ha conseguido armonizar ambas visiones. El presidente ha optado por llevar la medida a consulta para asegurar legitimidad interna y protección jurídica, al tiempo que, tras asumir su fórmula mercantil, mantiene a Laghrari al frente de la estrategia financiera y de captación de capital.
El ‘banquero’ de confianza del presidente ha empezado a entablar desde hace meses conversaciones exploratorias con fondos internacionales y grandes fortunas familiares, tanto europeas como estadounidenses. Entre los interesados figuran Sixth Street y la familia Arnault, que han comenzado a monitorizar la reacción de los socios y aficionados a la entrada de capital inversor.
El club asegura que la estructura planteada no alterará la esencia del modelo de propiedad, ya que cada socio recibiría participaciones limitadas, restringidas a una por persona y negociables únicamente en un mercado interno controlado entre socios.
Más de 10.000 millones de valoración
La valoración del club será uno de los ejes centrales para atraer inversores. Con la expansión global de la marca, el impulso del nuevo Bernabéu y la expectativa de albergar eventos premium como la NFL, las estimaciones internas señalan que el Real Madrid podría superar los 10.000 millones de euros de valoración.
Durante la presentación, Pérez añadió otras actualizaciones clave sobre proyectos estratégicos del club. Confirmó que la insonorización del Bernabéu estará terminada en diciembre, un paso decisivo para consolidar el estadio como espacio multifuncional con actividad constante.
Subrayó igualmente que el proyecto para un distrito tecnológico de Valdebebas generará “muchos millones” en ingresos para apuntalar la sostenibilidad financiera a largo plazo. Además, anunció que el Real Madrid ya ha iniciado el proceso para reclamar miles de millones a la UEFA tras la resolución favorable de la Audiencia Provincial de Madrid en el caso de la Superliga, y deslizó que cualquier entendimiento con el ente europeo pasaría por una negociación alrededor de la plataforma de emisión del fútbol que plantea el Real Madrid.
También destacó que el concepto «Bernabéu Infinito» con Apple será muy relevante para el futuro audiovisual y tecnológico del club, y avanzó que las conversaciones sobre los aparcamientos se llevarán a cabo con el Ayuntamiento de Madrid para definir la solución definitiva.
La voluntad del presidente es que la votación pueda celebrarse en una fase temprana de 2026, una vez completados los preparativos jurídicos y financieros. Pérez confía en que el referéndum sirva para consolidar este proyecto de modernización estructural sin comprometer la identidad histórica del Real Madrid, un equilibrio que considera fundamental para afrontar la próxima década.