El distanciamiento de Irene Rosales del clan Pantoja parece haber llegado a un punto definitivo. Aunque siempre existirá un vínculo inevitable con Kiko Rivera por sus hijas en común, la sevillana lleva meses desvinculada de todo lo que ocurra alrededor de la … mediática familia. Tras una separación que obligó a reorganizar su vida y la de su exmarido, ambos han logrado estabilizar una relación cordial centrada únicamente en el bienestar de sus niñas.
Con ese nuevo escenario personal, Irene ha retomado proyectos propios y no ha dudado en gritar al mundo que está ilusionada de nuevo, incluso compartiendo una escapada romántica con su novio. Mientras ella daba pasos hacia adelante, en el entorno de Kiko estallaba una nueva tormenta mediática después de su entrevista en ‘De viernes’, donde abrió la puerta a una posible reconciliación con su hermana Isa Pantoja.
Una semana más tarde, era la propia Isa quien acudía al mismo plató para responder a las declaraciones del DJ. Allí, además de mostrar cierta sorpresa por el acercamiento, dejó una reflexión que señalaba directamente a Irene: «Da la casualidad de que ya no está con Irene y está solo». La hija menor de Isabel Pantoja apuntaba a que la separación habría influido en que su hermano tomase la iniciativa, aunque matizó: »Yo no le echo la culpa a Irene en sí, pero ha afectado mucho a que tome esa decisión el hecho de que esté sin su mujer, sin tener ese apoyo».
Las palabras no pasaron desapercibidas y el foco se colocó inmediatamente sobre la reacción de Irene, quien, pese a estar alejada de los medios y del universo Pantoja, era inevitablemente aludida. Sin embargo, fiel a la prudencia con la que ha afrontado todo este proceso, su respuesta ha sido escueta y contundente.
Al ser preguntada por las declaraciones de Isa en ‘De viernes’, Irene dejó claro que no piensa reabrir heridas ni entrar en polémicas: «No he visto nada, pero ya son capítulos cerrados, por mi parte», una frase que marca una línea definitiva con todo lo que rodea a su antigua familia política. Con esas palabras, zanjó cualquier debate y se desvinculó públicamente de cualquier conflicto derivado de la situación entre los hermanos.
Eso sí, Irene no dejó pasar la oportunidad de remarcar que su relación con Kiko Rivera atraviesa un buen momento dentro de la nueva dinámica familiar: «Con Kiko todo muy bien, es el padre de mis hijas», reafirmando que el respeto y la cordialidad se mantienen por el bien de las pequeñas.
Mientras la reconciliación entre los hermanos Rivera Pantoja sigue generando titulares y reacciones, Irene parece tener claro su camino: vivir al margen de ese universo mediático que durante años marcó su vida, centrada ahora en su felicidad personal y en construir una nueva etapa lejos de los focos familiares.