«Si alguien demuestra que esa reunión se produjo me comprometo ante el pueblo vasco a presentar mi dimisión», ha dicho hoy Arnaldo Otegi, en reacción a una exclusiva de ‘El Español’, según la cual el líder de EH Bildu se vio con Pedro Sánchez … para negociar la moción de censura a Mariano Rajoy celebrada entre el 31 de mayo y el 1 junio de 2018. Un encuentro que habría propiciado Antxon Alonso (dueño de Servinabar y socio del ex secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán), que, según reconoció el propio Otegi este verano fue el encargado de establecer un canal de comunicación «discreto» entre ambos partidos tras su salida de la cárcel en 2016.

De acuerdo con la información publicada por este medio, hubo diversos encuentros entre Otegi y la dirección socialista después de la sentencia de l gurtel (24 de mayo de 2018) que derivó en la moción de censura al Gobierno de Rajoy. En una de ellas, Pedro Sánchez y Santos Cerdán, habrían volado desde Madrid a Bilbao, donde les esperaba Koldo García para trasladarles en un coche donde también acudió Arnaldo Otegi acompañado de otras dos personas de su confianza.

El muñidor de esta cumbre, que duró alrededor de 3 horas y donde Koldo García se quedó en la puerta, habría sido Antxon Alonso. No fue el único encuentro, lo hablado se habría concretado en otros dos encuentros en el mismo caserío, entre Arnaldo Otegi, Santos Cerdán y el dueño de Servinabar. «Es rotundamente falso que existiera esa reunión. Creo que tengo acreditada cierta credibilidad ante nuestro pueblo. Nunca he hablado con Pedro Sánchez», ha dicho este lunes el secretario general de EH Bildu.

Otegi ha negado que tuviera ninguna «responsabilidad directa» en la negociación de la moción de censura: «Y si la hubiese tenido no tendría ningún problema en decirlo». Además, ha señalado a Koldo García como «colaborador de la Guardia Civil», acusándole de mentir: «Seguramente estará pactando como salvar su piel ante la judicatura. Es rotundamente falso. Yo jamás he estado reunido con Pedro Sánchez».

Fue el pasado mes de junio, en su declaración ante el Tribunal Supremo y antes de ser enviado a prisión preventiva, cuando Santos Cerdán desveló el papel como mediador de Antxon Alonso con EH Bildu y el PNV de cara a la moción de censura. Ambos se conocían desde 2006, según las investigaciones de la Guardia Civil, cuando Cerdán era concejal en Milagro (Navarra), y el ex secretario de Organización del PSOE le utilizó para ponerse en contacto con Otegi, dado que ambos son del mismo pueblo Elgoibar (Guipúzcoa).

Así, mientras el PNV se apresuró a desmentir la mediación de Antxon Alonso, a pesar de su contrastable relación con figuras empresariales de la órbita nacionalista, el líder de EH Bildu reconoció su papel en dos ocasiones después de su salida de prisión. En un primera reunión, de acuerdo con las palabras de Otegi, Antxon Alonso le trasladó que había alguien en el Partido Socialista de Navarra (PSN) que quería ponerse en contacto con él.

Era Santos Cerdán que por aquel entonces (entre 2011 y 2017) ocupaba la secretaría de Organización del PSN y tuvo un papel clave en la recogida de avales en la región para la candidatura de Pedro Sánchez a las primarias del PSOE celebradas en 2017. En la segunda reunión con Antxon Alonso reconocida por Otegi ya estaba Cerdán, y sirvió para establecer un canal de comunicación «discreto» entre el PSOE y EH Bildu.

Una «vía de comunicación» que, dando por buenas las palabras de Cerdán y Otegi, habría sido la primera piedra en la alianza entre Pedro Sánchez y EH Bildu. Un hecho clave para sus tres investiduras como presidente del Gobierno (en 2018, 2019 y 2023) y múltiples votaciones de calado en el Congreso de los Diputados, pero también para otros líderes socialistas como María Chivite. La presidenta de Navarra, que tenía en Cerdán un amigo y valedor, pues coincidió con él en su ascenso dentro del PSN, alcanzó la presidencia de la Comunidad Foral por primera vez gracias a la abstención de EH Bildu en 2019.

Cuatro años antes, y a un mes de las elecciones autonómicas y municipales previas en la comunidad autónoma, Sánchez enunciaba otra de sus frases más recordadas: «Con Bildu no vamos a pactar; si quiere se lo digo 5 veces o 20. Con Bildu no vamos a pactar». Tras esto y aunque nunca se ha hecho pública la contrapartida exigida por Bildu, se ejecutó el traspaso de la Administración Penitenciaria al País Vasco en 2021, se completó el acercamiento de los presos etarras poniendo fin a la política de dispersión en 2023 y en diciembre de ese mismo año el PSN brindó la alcaldía de Pamplona a Joseba Asiron, con su voto a favor en la moción de censura a Cristina Ibarrola (UPN).