El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes, rechazó en el Senado la acusación del grupo popular de que ejerce presiones sobre el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), con sede en Lausana (Suiza), para que se pronuncie a favor del reconocimiento internacional de la Federación Vasca de Pelota.
«Presionar a mí es lo último que se me ocurre, trato de entender y no sé lo que va a pasar. El TAS decidirá lo que tenga que decidir. Lo que podemos decir es que no se ha roto España. La pelota vasca, que ya sé que se practica en más sitios, tiene un origen, una historia y un país que se quiere a sí mismo y lo ve con buenos ojos«, afirmó.
Presionar a mí es lo último que se me ocurre, trato de entender y no sé lo que va a pasar. El TAS decidirá lo que tenga que decidir
José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes
Rodríguez Uribes respondió así en la Comisión de Educación, Formación Profesional y Deportes del Senado al senador popular Vicente Azpitarte, quien le cuestionó por el retraso de la resolución que estaba prevista este viernes en el TAS sobre el caso, ante las presuntas presiones del grupo Vasco y el Gobierno.
Y es que el TAS ha anunciado hoy mismo que pospone esa resolución, en la que debe declararse competente o no para juzgar este caso, hasta el próximo 19 de diciembre.
Azpitarte denunció que el Gobierno, a cambio de votos, aceptara que selecciones autonómicas puedan disputar partidos internacionales y lo calificó como «corrupción política y económica», tras asegurar que la Diputación Foral de Vizcaya otorgó 250.000 euros a la Federación Internacional para organizar algo que vale 50.000, en alusión a la Liga de Naciones de Gernika en junio, en la que Euskadi hizo su debut internacional y compitió contra España.
A mí, a priori, que el gobierno vasco potencie la pelota vasca me parece muy bien y usted debería estar orgulloso de que el logo del CSD esté en Gernika, porque hace 20 años era impensable
José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes
«Esto es corrupción económica, no son recortes de prensa, son pruebas. ¿Por qué teme hablar de la Fundación Deporte Joven?, ¿por qué el exprofesor de esquí de la familia Sánchez Gómez fue nombrado director y dimitió dos días antes de conocerse el demoledor informe de Hacienda sobre Juan Carlos Barrabés?, ¿por qué no dice quién controla las cuentas de la fundación que puede disponer de 300.000 euros sin dar explicaciones?», inquirió Azpitarte.
«No sé cuánto hay de verdad en eso», respondió Rodríguez Uribes. «A mí, a priori, que el gobierno vasco potencie la pelota vasca me parece muy bien y usted debería estar orgulloso de que el logo del CSD esté en Gernika, porque hace 20 años era impensable. Naturalizamos, normalizamos. A veces financiamos cosas donde está el PP y no pone el logo del CSD. Me alegra mucho que en [el frontón de] Gernika esté el CSD y la Federación Española, que es la que decide participar«, prosiguió.
Vacío a la Federación Española
Detrás de estas declaraciones de Rodríguez Uribes se esconde una realidad que el presidente del CSD prefiere omitir. Porque es cierto que la Federación Española está participando en todas las competiciones que ha organizado este año la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIPV) pero lo está haciendo obligada y con recursos muy limitados frente a sus compañeros de la selección vasca, que sí cuentan con un apoyo económico importante de su gobierno.
Tanto la Liga de Naciones de junio en Gernika como la que se está celebrando ahora en Bilbao son clasificatorias para el Mundial del año que viene en Venado Tuerto (Argentina), del 9 al 18 de octubre de 2026, por lo que la Española no ha tenido más remedio que participar para no perjudicar las opciones de clasificación de sus pelotaris.
Lo ha hecho, eso sí, sin reconocer la oficialidad de ambos torneos, que se disputan en suelo español sin el consentimiento expreso del CSD. De hecho, el logo del CSD, que sí estaba en el frontón de Gernika, no está ya en el de Bilbao.
La Federación Española, que era quien debería haber solicitado al CSD la autorización para la celebración de un torneo internacional en suelo español, no lo hizo nunca y pidió explicaciones al organismo rector del deporte español.
Unas explicaciones que nunca llegaron a producirse porque Rodríguez Uribes no ha contestado hasta en tres ocasiones a la petición de reunión solicitada por Javier Conde, presidente de la Federación Española.