‘Gran Hermano’ ha abierto sus puertas de nuevo. Esta vez no las de la casa de Guadalix de la Sierra. Después de 31 ediciones entre versiones anónimas, VIP, DÚOS y reencuentros, el reality show se ha mudado a Tres Cantos. Buscaban un espacio mayor para adaptarse a las nuevas dinámicas del formato. El concurso lleva en emisión 25 años, y sigue siendo una de las grandes apuestas de la cadena. Sin embargo, no todo parece estar saliendo como habían planeado.
El reality show modifica su dinámica para afrontar una expulsión múltiple. Con el abandono de Íñigo «por motivos personales» presente, la organización de ‘Gran Hermano’ adelanta que un camión de la mudanza visitará la casa de Tres Cantos «para llevarse a los que no convencen a la audiencia«.
Esas palabras revelan que ‘Gran Hermano’ podría enfrentarse a una expulsión múltiple. Actualmente, José Manuel, Patricia y Belén están nominados. Uno de ellos abandonará sí o sí la casa tras someterse al veredicto del público. El más votado para salir de la casa será el eliminado definitivo. Tras esta votación, el reality show tiene previsto poner en marcha un televoto en positivo. El menos o los menos votados de esta serán desalojados en el mencionado camión de la mudanza.
El equipo de ‘Gran Hermano’ invitó a Edi, Violeta y Anabel Pantoja en un intento de mejorar los datos de audiencias de la vigente edición
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Esta dinámica ya se vio en la última edición de ‘Gran Hermano’. Sin embargo, en esa ocasión, el expulsado fue Luis tras ser el menos votado. Lo llamativo es que esta vez la voz en off del programa de Telecinco habla en plural: «Y vuelve un clásico: llega el camión de la mudanza para llevarse a los que no convencen a la audiencia«. «Cada voto cuenta en ‘Gran Hermano'», insiste el anuncio del concurso.
Estas palabras dan a entender que se espera una expulsión múltiple, la de uno de los nominados y la o las salidas de quienes no cuenten con el apoyo de la audiencia. Con esta iniciativa se librarán de aquellos señalados de ser los «muebles» de la edición. En cualquier caso, la vigente edición de ‘Gran Hermano’ ha pisado el acelerador. Esto está provocado por las audiencias cosechadas tanto en su gala principal –11% de share el pasado jueves– como en el último debate dominical –8,9% de cuota de pantalla–. El formato no está cosechando los datos esperados. Con esta decisión, Mediaset adelanta su final.
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Las primeras hipótesis apuntan a que su abandono podría estar relacionado con alguna situación familiar delicada.
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Un abandono repentino
La posibilidad de una expulsión múltiple llega después de que Íñigo Tina abandonase el formato de manera voluntaria. La organización de ‘Gran Hermano’ apuntó que esta decisión se debía a «motivos personales ajenos al programa». Es decir, no se trata ni de una expulsión disciplinaria ni de ningún conflicto interno.
De momento, no se han conocido los motivos de su salida. Ni la organización ni el propio concursante han dado más detalles. Las primeras hipótesis apuntan a que su abandono podría estar relacionado con alguna situación familiar delicada, posiblemente una enfermedad o un problema grave que habría requerido su presencia inmediata fuera del concurso. A la espera de una versión oficial, las redes se han llenado de mensajes de apoyo y preocupación hacia el concursante.