Dos años después de contratar al fisiólogo Íñigo San Millán, el preparador estrella que ha navegado a la vera de todos los éxitos de Tadej Pogacar, el Athletic prosigue su proceso de captura en el ciclismo y en el mejor equipo del mundo, el … UAE. El club vasco ha fichado, se entiende por recomendación de San Millán, al masajista personal de Pogacar, Joseba Elguezabal, el confesor de sus pensamientos, el hombre de confianza absoluta del ciclista que está marcando una época.
Elguezabal, el tipo que ha moldeado las piernas del campeón, se ha incorporado a la estructura deportiva del Athletic como masajista de la primera plantilla del fútbol en un trasvase que ya se produjo hace treinta años. En 1995 el Athletic también reclutó al médico estrella del pelotón, Sabino Padilla, asesor particular de Miguel Induráin y de un atleta que fue un referente, el maratoniano Martín Fiz. El positivo por nandrolona de Gurpegui fue el detonante para que Padilla abandonase el club.
Tal y como ha informado El Correo, Elguezabal se ha incorporado el pasado lunes al primer equipo del Athletic, donde va a reforzar la plantilla de fisioterapeutas. Queda claro que su vinculación con Íñigo San Millán, designado hace dos años como director de alto rendimiento del club vizcaíno, ha sido determinante para su contratación.
San Millán ha sido el ideólogo de los éxitos de Tadej Pogacar como preparador de rendimiento del ciclista esloveno. Su enfoque combina la fisiología del ejercicio con análisis de datos para optimizar la preparación de los deportistas de élite y, en particular, la del equipo UAE y su máxima estrella.
El fisiólogo español también ha sido la mente gris que ha estado detrás de la progresión del español Juan Ayuso, quien se convirtió en ciclista profesional con el UAE-Emirates y ha cambiado este verano de equipo, al Lidl, después de múltiples desavenencias con el patrón de la escuadra, Mauro Giannetti. San Millán es doctor en Fisiología y ha sido profesor en la Universidad de Colorado (Estados Unidos).
Joseba Elguezabal, 44 años, nacido en la localidad vizcaína de Gatika, ha sido el alma gemela de Tadej Pogacar desde que debutó en el ciclismo profesional, aquella inolvidable temporada 2019 en la que deslumbró en la Vuelta a España, al ganar tres etapas y acabar tercero en la general con solo 19 años. Un novato genial.
El confidente
Elguezabal no solo era hasta ahora el confidente de Pogacar, también el que mejor conocía sus piernas y su musculatura. El que le proporcionaba protección en las caóticas llegadas de meta del ciclismo, el que le traía el primer refresco y el primero en saber los pormenores de la etapa o la victoria del portento esloveno.
La sombra vizcaína ha viajado junto a Pogacar en todos los éxitos que ha levantado el sensacional ciclista. Los cuatro Tour de Francia (2020, 2021, 2024 y 2025), el Giro de Italia (2024), el Tour de Flandes, la Lieja-Bastogne-Lieja, Il Lombardía o la Strade Bianche. En teoría no estuvo con él en los dos Mundiales de ruta que ha conquistado (2024 en Zúrich y 2025 en Ruanda), ya que el ciclista dependía de los servicios de la federación eslovena.
Elguezabal ha estado en todos los éxitos de Pogacar desde su debut en 2019
Elguezabal ha destacado por su discreción, siempre imposible obtener de él un relato aproximado de las andanzas o los datos de Tadej Pogacar. «Él es especial, cada día en este equipo, UAE Team, es un sueño, una espectacular experiencia de la que soy un privilegiado», escribió el fisioterapeuta en sus redes sociales.
El masajista de Pogacar ya trabajó en el Athletic en la temporada 2013-2014, cuando en el equipo infantil de Lezama despuntaba Nico Williams.
Treinta años después de Gurpegui, el Athletic también ha vivido en los últimos tiempos un episodio de dopaje. El defensa central Yeray fue suspendido por diez meses después de dar positivo por una sustancia enmascarante y prohibida, la canrenona, que el jugador achacó a un crecepelo.