Las vacaciones estivales de la Familia Real en Mallorca han culminado este martes 5 de agosto por todo lo alto en la Plaza de Sa Llonja de Palma. El Rey Felipe VI y la Reina Letizia, junto a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, se han dado todo un baño de masas a su salida de la exposición en homenaje al artista catalán Joan Miró. Aunque, como es habitual, todas las miradas las ha acaparado Letizia, con un espectacular vestido midi rosa que resaltaba su bronceado y unas alpargatas bajas de esparto.
Muy emocionada y aclamada por el público mallorquín de Palma.
Entre vítores y cantos de «Viva el Rey» y «Viva España», una multitud de más de un centenar de personas aguardaba a los Reyes a la puerta de Sa Llonja. Tras un posado frente al edificio histórico, Letizia no ha dudado en acercarse a los que allí se congregaban -turistas nacionales y extranjeros, pero también mallorquines- para saludarles y darles la mano. A este tierno gesto se ha sumado la princesa Leonor, su hermana, la infanta Sofía y el monarca, en ese orden.
La Reina fue la primera en acercarse a saludar a los ciudadanos.
La Reina ha parado a conversar con alguno de los presentes e incluso se ha tomado varias fotos con ellos. Una amplia sonrisa ha iluminado su rostro durante los más de diez minutos de despedida a unas vacaciones que serán recordadas como las del debut de la Heredera al trono, la princesa Leonor y su hermana, la infanta Sofía como anfitrionas en la recepción anual a la sociedad balear en Marivent.