Las claves
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Pedro Sánchez defiende su gestión al frente del Gobierno y asegura que su prioridad es proteger a las mujeres y erradicar la corrupción del PSOE.
El presidente destaca la actuación contundente del partido ante los casos de corrupción y acoso sexual, diferenciándose de la derecha, a la que acusa de connivencia.
Diversos dirigentes socialistas, incluido un exministro y altos cargos, han sido detenidos en el marco de investigaciones por corrupción y acoso sexual.
Sánchez responde a las críticas de la Conferencia Episcopal y asegura que no habrá elecciones anticipadas, insistiendo en cumplir el mandato constitucional hasta 2027.
Pedro Sánchez ha admitido este domingo que España y su Gobierno atraviesan un momento «difícil», pero ha asegurado que quiere seguir siendo presidente para «proteger a las mujeres«.
Y ha presumido de haber «extirpado de cuajo y toda la raíz los casos de corrupción» que salpican al Gobierno.
Pedro Sánchez ha realizado estas declaraciones en Cáceres, en un mitin de campaña del PSOE para las elecciones extremeñas, tras la cascada de escándalos de corrupción y acoso sexual que le han estallado al PSOE en la última semana.
En un contexto tan complejo como el que atraviesan actualmente España, Europa y el mundo, «menos mal que no gobiernan la derecha y la ultraderecha«, ha rematado.
Mientras permanecen en prisión el exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García, esta semana fueron detenidos la fontanera de Ferraz Leire Díez, el expresidente de la SEPI Vicente Fernández y el empresario Antxon Alonso, socio del exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán (que también acaba de pasar por prisión) en la constructora Servinabar.
La UCO ha registrado y ha requerido información en las sedes de la SEPI, Mercasa, Correos y los ministerios de Hacienda y Transición Ecológica.
Al respecto, Pedro Sánchez ha lamentado que «la corrupción es una traición al PSOE y a los principios del PSOE«.
Pero, «a diferencia de la derecha», ha añadido, «cuando desgraciadamente sufrimos un caso de corrupción», los socialistas «actuamos con contundencia y extirpamos de cuajo y toda la raíz los casos de corrupción».
En cambio, ha dicho, la derecha tiene «connivencia» con la corrupción.
En el acto en el que ha estado acompañado por el candidato socialista Miguel Ángel Gallardo, Sánchez ha admitido que el PSOE ha podido cometer «errores» al gestionar los casos de acoso sexual que han surgido en el partido.
Pero, ha recordado, «hemos sido los primeros en aplicar con todas las consecuencias el protocolo de acoso y abuso».
Lo cierto es que el PSOE metió en un cajón durante cinco meses las denuncias por acoso sexual presentadas en el canal interno del partido por dos afiliadas contra el exasesor de Moncloa Paco Salazar.
Y ahora la dirección del PSOE ha decidido no enviar a Fiscalía esas denuncias, aunque considera que los hechos relatados son «verosímiles».
A lo largo de la semana, otros cinco dirigentes socialistas han sido señalados como autores de presunto acoso sexual a mujeres.
«Habremos cometido errores», ha dicho al respecto este domingo Pedro Sánchez, «pero hay que recordar siempre lo importante, todos los derechos y libertades de las mujeres han venido de la mano de las mujeres y del PSOE».
«Gobernar es dar la cara, estar a las duras y a las maduras, afrontar los problemas y dar soluciones», ha señalado, «no es imponer la ley del silencio, mirar hacia otro lado y hacer la técnica del avestruz, para eso ya tuvimos a Rajoy».
Sánchez ha aludido a las críticas que recibe el Gobierno de aquellos que «no nos quieren tanto, tertulianos en medios conservadores, y alguno también progresista bienintencionado».
También se ha referido a la entrevista publicada este domingo en La Vanguardia, en la que el presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, se muestra partidario de que haya una moción de censura, moción de confianza o elecciones anticipadas.
«Hay una cuarta opción», le ha dicho Sánchez, «respetar el resultado electoral, aunque no le guste».
Y le ha recordado que «el tiempo en el que los obispos interferían en la política terminó cuando empezó la democracia en nuestro país».
También ha hecho una recomendación al presidente de la Conferencia Episcopal: «Le animo a que se presente a unas elecciones, ahí tiene la asociación ultraderechista Abogados Cristianos. Que se presente, a ver qué resultado saca».
A pesar de que el Gobierno ya no tiene mayoría para aprobar leyes ni presupuestos, Sánchez ha insistido en que no habrá elecciones hasta 2027, porque hay que cumplir el «mandato constitucional» que establece que cada legislatura dura cuatro años.
No cumplió ese «mandato constitucional» ni en 2019 ni en 2023, cuando convocó elecciones anticipadas.
«Por supuesto que merece la pena gobernar, aunque sea en estas circunstancias», ha indicado el presidente, «no os equivoquéis, menos mal que gobernamos nosotros». Y ha insistido: «Menos mal que no gobierna la derecha y la ultraderecha«.
También el candidato del PSOE a la Presidencia de la Junta de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, se ha referido a los casos de acoso sexual destapados en los últimos días, que salpican a media docena de dirigentes socialistas.
«Esta semana hemos vivido situaciones que nos avergüenzan a todos», ha dicho, «nuestro partido es el de la igualdad y feminismo. Aquí no caben los que dicen que son compañeros, pero son puteros y acosadores. No caben«.