La Revuelta despide el 2025 con María Galiana como invitada. La actriz, reconocida por su papel de doña Herminia en Cuéntame, ha visitado el programa de David Broncano para hablar de sus proyectos actuales: su cameo en la serie Atasco y su obra teatral Yo solo quiero irme a Francia.
Nada más entrar en plató, la intérprete riño al presentador por decir la edad que tiene: «Yo que quiero disimular…». «Te pido perdón, he consultado, como valoración de todos tus años en activo», se justificó Broncano. «Todo lo contrario, presumo», añadió ella, asegurando que no le había importado. «¿90 realmente?», le preguntó el jiennense, a lo que Galiana respondió de manera afirmativa.
Tras esta primera intervención, María Galiana aprovechó para pedir perdón a la Guardia Civil por haberles insultado en el papel que interpreta en la serie Atasco. La conversación derivó a que Broncano le preguntara si ella conduce. «He renovado mi carnet este año», fue su respuesta, con la que recibió un «enhorabuena» por parte del presentador y aplausos de los espectadores.
«Ahora con tu edad, ¿cada cuántos años es?», quiso saber Broncano sobre la renovación del permiso de conducción. «Hace dos años, en el 2023, me lo dieron por dos años. Este año lo he renovado…», empezó ella con su explicación, pero Broncano la interrumpió y terminó su alegato diciéndole: «Por cinco meses». «No, me han dado un papel que me espere y a mi casa me mandarán el carnet. Estoy en vilo porqu no pone hasta cuanto«, detalló. «Igual con 90 años es de semana en semana», prosiguió el comunicador con la broma. «Pues casi, casi», alegó ella entre risas.
«¿Coges el coche?», continuó Broncano con su cuestionario. «Claro, voy al supermercado, a ver a mis hijos […] Eso es lo que yo cuento, sin que nadie se entere, en cuanto puedo me voy a la playa, pero eso no se puede contar porque a mi edad no está permitido», confesó María Galiana sobre el uso que le da a su vehículo particular.
La intérprete aseguró que a ella le gusta mucho conducir y aprovechó la intervención para explicar cómo se hacía el examen en los años 60: «En Sevilla, detrás del campo del Betis, que es mi equipo […] Ponían unos bolardos y te decían que aparcaras. Si te subías en la acera, te suspendían, que no, aprobabas. Sin teórico».
Finalmente, recordó cómo fue la primera vez que cogió el coche: «Fui a recoger a mi marido por la noche, que estaba en una conferencia […] Iba por la carretera y me para la Guardia Civil. ‘Señora, que lleva usted la luces largas, va a deslumbrar al que venga en frente’, me dijeron. Yo no sabía que había dos luces. No había nadie más por la carretera […] Fueron tan amables que me enseñaron para qué valía cada palanca».