La derrota en La Rosaleda deja muy malas sensaciones de cara al inicio liguero del lunes 18, pero, sin duda, para los verdiblancos resulta más preocupante si cabe la lesión de Isco Alarcón. Y es que el futbolista costasoleño terminó la primera parte cojeando y con claros gestos de dolor y se quedó en el vestuario tras el descanso al no poder continuar.
Y es que en la recta final de la primera parte el centrocampista bético sufrió una dura entrada de Larrubia que obligó a Pellegrini a sustituirlo por Giovani Lo Celso y que encendió las alarmas en el seno verdiblanco con el debut liguero tan cercano.
Una alerta que se agravó al término del choque cuando la estrella bética abandonó el estadio de La Rosaleda con muletas, visiblemente molesto y con un aparatoso vendaje en la pierna izquierda, la cual en ningún momento podía apoyar, lo que revela que se puede tratar de una lesión importante. No en vano, el golpe fue en el tobillo izquierdo, el mismo del que fue operado el año pasado, lo que genera mucha preocupación en el club.
Ahora mismo, el parte médico queda a expensas de las pruebas que se le realicen este domingo una vez se reduzca de la inflamación para conocer el alcance exacto de la peor noticia posible que podría recibir el cuadro verdiblanco en este momento.
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Marc Bartra, en zona mixta, no pudo mandar, tal y como le habría gustado, un mensaje tranquilizador, pues es consciente de que hay que esperar a las pruebas y que la situación no es halagüeña, culpando al árbitro por no haber frenado antes el juego duro. «Está… bueno. Es más de lo mismo. Patadas a destiempo. Si se paran antes, estas cosas no pasan. Como la de Iker al final. Esperemos que quede en un golpe y ya está», señaló el central, que comparte preocupación con el resto del beticismo, pues perder a Isco para el arranque liguero sería un duro golpe apara el equipo.
No en vano, el Betis desapareció en ataque en la segunda parte sin la presencia de Isco, pues Lo Celso no se sintió cómodo en el rol de faro de la propuesta ofensiva y el Betis apenas si generó peligro más allá del gol del Cucho.
En el club existe ahora mismo mucha precaución, conscientes de lo padecido con la lesión que le obligó perderse buena parte de la campaña pasada, en la que su reaparición coincidió con el subidón del equipo de Pellegrini. En las próximas horas se conocerá el alcance de las molestias.