May Sarton, poeta, memorialista y escritora, nació en Bélgica. Autora prolífica, cultivó la poesía, la novela y la literatura infantil, aunque su gran aportación, sin … duda, fueron los diarios y las memorias.

¿Puede una casa ser algo más que un lugar?

En ‘Anhelo de raíces’ (Gallo Nero Ediciones, traducción al español de Mercedes Fernández Cuesta), Sarton nos invita a acompañarla en su aventura más íntima: la búsqueda de un hogar, un lugar donde echar raíces. May decide comprar una casa en Nelson, un pequeño pueblo de New Hampshire (EEUU). Se encuentra entre la duda y la esperanza. ¿Sería feliz en aquella casa? ¿Era una idea descabellada?

Nelson, se convierte en un escenario de aire cristalino, rodeado de arces, un mundo resplandeciente donde el silencio, ese que tanto ansiaba, se vuelve alimento. Silencio, campo, árboles, prados… Buscaba luz y buscaba crear armonía. Consideraba las flores como una necesidad.

La vida en esta nueva casa supone para Sarton aprender a hacer todo desde el principio, por su cuenta, y eso formó parte de la aventura.

‘Anhelo de raíces’ no narra únicamente un traslado físico, sino su memoria, una crónica existencial, vivir en soledad, su rutina diaria como escritora, las amistades, los vecinos, las visitas, la buena conversación, el mundo de la naturaleza y sus misterios, y el peligro de ese silencio inmenso que magnifica las cosas.

Sarton encontró de nuevo una familia y una oportunidad de renovación a partir de una nueva vida. Experimentó el poder de resistir y renovarse. Descubrió la paz, y la belleza a través de los paseos matutinos, el poder escribir por la mañana, el jardín por la tarde, y la conciencia total.

Su prosa es clara, reconfortante, relajante, armoniosa, balsámica. Un libro íntimo, lleno de luz, silencios y profundidad.