Madrid (EFE).- El incendio declarado este lunes en Tres Cantos (Madrid), que ha dejado un fallecido y varios heridos, también ha puesto en riesgo a decenas de animales en centros y fincas de la zona, donde sus responsables han pasado una noche “agónica” para evitar que las llamas alcanzaran sus instalaciones.
Según han detallado a EFE desde Burrolandia, la asociación dedicada al cuidado y rescate de burros y otros animales, el incendio, detectado sobre las 20.10 horas gracias a las cámaras de control animal y seguridad de la finca, rodeó el lugar por el frente, el lateral derecho y la parte trasera.
La Guardia Civil llegó al recinto sobre las 21.00 horas y, por precaución, se abrieron los cercados para que todos los animales pudieran moverse libremente durante la noche y escapar si el fuego alcanzaba la zona.
“A las 04.30 horas consiguieron mitigar el fuego de enfrente y entonces ya pudimos respirar un poco”, ha relatado un portavoz de Burrolandia, que ha atribuido el resultado a la rápida activación de sistemas de riego automático y a que la finca se encontraba “empapada” tras la intervención preventiva.
La mayoría de animales no han resultado heridos
Aunque la mayoría de los animales no han resultado heridos, se ha detectado que algunos, como un caballo llamado Felipe, presentan el lomo ennegrecido y posibles quemaduras.
“Si no fuera porque tenemos medios y cámaras para saber dónde estaba realmente el fuego, la noche habría sido imposible. Ha sido agónica, horrorosa”, ha resumido el responsable.
Por otro lado, en la guardería canina Peludos al Agua, también en Tres Cantos, las llamas han pasado junto a la valla perimetral.
Desde el centro han explicado que la limpieza del terreno y la ausencia de materiales inflamables han sido clave para que el fuego no se propagara: “Con una manguera seguimos el avance del incendio por la valla y vimos cómo pasaba de largo”.
A poca distancia de allí, la Residencia Canina Villa Liberty también pasó horas de incertidumbre.
Su propietario ha confirmado que, “milagrosamente, todos los animales están bien”, aunque lamenta profundamente lo ocurrido.
“En mis 60 años de vida nunca había visto un incendio tan horrible. Es devastador para las personas, para el monte y para todos los seres vivos que lo habitan”, ha destacado.