La dirección deportiva del CB Es Castell está inmersa en semanas de mucho ajetreo con el fin de dejar cerrada una plantilla competitiva para que el nuevo entrenador del primer equipo, Raúl Jodra, pueda trabajar desde el primer día de entrenamientos con las mayores garantías posibles.
Por tanto, no sorprende que el hombre más ocupado del club en estos momentos sea Dani Sastre. En su día, el director deportivo gualdinegro fue el encargado de dar el primer paso de cara a la planificación de la nueva temporada: entendió que era el momento de apostar por un nuevo entrenador.
«Es una cuestión meditada desde hace un tiempo. Cuando termina la temporada, tú vas viendo cosas. Y este año aprecié un cierto desgaste en según qué ámbitos. Al final, como director deportivo estoy para estas cosas. No hay nada peor que creer que debes tomar una decisión y no tomarla. Eso sí que es una decisión errónea», explica Sastre sobre la destitución de Oriol Pagès, para quien solo tiene palabras de agradecimiento. «El club es mejor ahora que cuando Oriol llegó. Y yo soy mejor director deportivo ahora que antes de trabajar con Oriol. Tengo un gran respeto y una gran admiración por él», confiesa.
Dani Sastre, artífice del mercado que está firmando Sa Tintina Es Castell. | Foto: Gemma Andreu
Nuevos pasos con Jodra
Después de varias semanas entrevistándose con diversos representantes y entrenadores, lo único que Sastre tenía claro es que el nuevo inquilino del banquillo debía aportar «aire fresco». Y eso es justo lo que vio en Jodra.
«Cuando vino a jugar aquí con el SESE, nos ganó con un estilo que me gusta mucho: aprovechar muy bien los espacios y correr. El perfil de los jugadores que hemos fichado va en esta dirección», asegura el gerente.
De esta forma, Sastre cree que la entidad «puede mejorar», pero sin marcarse ningún objetivo concreto en términos clasificatorios. «Montamos la plantilla pensando que no perderemos ningún partido, pero evidentemente eso es casi imposible», bromea.
Base consolidada
Pese a lo comentado, la realidad es que Sa Tintina Es Castell ha conseguido añadir más pólvora a una base de jugadores que llevan años comprometidos con el proyecto. Además de los veteranos insulares Xavi Hernández y Sergi Llufriu, también ha conseguido retener a piezas clave como el catalán Josep Gascón, el cual apuntaba a una clara salida que finalmente no se ha producido pese a las suculentas ofertas recibidas.
«Estaba convencido de que Gascón no seguiría porque ha recibido llamadas de Segunda FEB. Iba haciendo la plantilla y comunicándome con él, sí, pero estaba convencido de que no lo retendríamos», revela Sastre.
Un fichaje fallido en la posición de alero y la voluntad del gironí por seguir en la Isla le dieron la vuelta a la tortilla y asegurando la continuidad de un jugador muy importante en clave gualdinegra. Dani Sastre tiene claro que la «seriedad» es el factor que marca la diferencia en este tipo de casos. «Pese a estar en Tercera FEB y tener una estructura humilde, somos un club serio. Si prometemos algo, lo cumplimos. Y eso el jugador lo valora mucho», destaca.
El reclamo del Hestia Menorca
Si el factor de la seriedad ya fuera un reclamo de por sí, la nueva vinculación con el Hestia Menorca sitúa a Sa Tintina Es Castell en una mejor posición en el mercado.
Eso le permite poder optar a jugadores que, de otra forma, no sería posible que recalasen en la Isla. Martí Corbera, incorporado desde el SESE, es un claro ejemplo de ello. «Corbera era una fijación de nuestro entrenador, un jugador que tuvo el año pasado y que le encanta. Ya había hablado con él antes de que viniera Jodra, pero su representante me decía que era imposible», recuerda Sastre.
Tanto va el cántaro a la fuente que dos meses después y con la intromisión de Javi Zamora, entrenador y director deportivo del Hestia Menorca, Corbera ha acabado siendo propuesto para convertirse en un jugador vinculado, misma condición de la que goza el melillense Víctor Fernández. Ambos siguen los pasos de Javi Rodríguez, el primer y único producto fruto de dicha vinculación en el curso 2023-24.
«Estarán con nosotros los cuatro días de entrenamiento y el partido. Con el Hestia irán por tres días por la mañana, como tenemos pactado, y siempre tendrán la posibilidad de ir convocados si se diera el caso», resume Sastre sobre la dinámica que seguirán los jugadores vinculados. De esta manera, los dos mejores equipos de baloncesto de la Isla se retroalimentarán gracias a un acuerdo que se presume un win-win de manual.
Un equipo para acaparar talento menorquín