La tragedia ha vuelto a golpear a un operativo exhausto que lucha contra la oleada de incendios que desde hace más de una semana calcina España. Un bombero forestal de la Junta de Castilla y León ha muerto este domingo por la noche, en una pista forestal de Espinoso de Compludo, en la comarca leonesa de Ponferrada, después de que el camión autobomba que conducía se precipitase por un terraplén cuando volvía de participar en las labores de extinción del fuego que arrasa los montes de Yeres y Llamas de Cabrera. Su compañero, un peón que viajaba con el fallecido, ha resultado herido y ha sido trasladado al Hospital de El Bierzo, donde permanece ingresado con pronóstico leve.

El accidente se produjo poco antes de las 22:30 horas, en un tramo de fuerte pendiente, cuando el convoy en el que estaba integrada la autobomba se retiraba del frente de lucha contra el fuego para descansar. Nadie en el dispositivo entiende aún qué ha ocurrido para que el vehículo se aproximase al talud y cayeses ladera abajo. Las labores de rescate, por otro lado, se han complicado por lo abrupto del terreno, con efectivos del 112, la Policía Nacional y el Sacyl trabajando a contrarreloj.

La Junta de Castilla y León, tras conocerse la trágica noticia, ha enviado sus condolencias a la familia, a los amigos y a los compañeros del bombero fallecido, a los que agradece su compromiso y entrega como integrantes del operativo INFOCAL. El presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, ha escrito en su perfil de la red social X que se encuentra “conmocionado” por el fallecimiento y ha enviado su «más sentido pésame y cariño» a los allegados, además de desear una pronta recuperación al herido. También el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, ha expresado públicamente su pesar y ha trasladado su pésame a la familia y al entorno del bombero forestal fallecido.

Con la muerte de este bombero, ya son tres las víctimas mortales que dejan los incendios forestales declarados (y todavía activos) en la provincia de León. El fallecido es, además, el primer miembro del operativo de la Junta que pierde la vida. Días atrás murieron otros dos voluntarios, Abel Ramos y Jaime Aparicio, cuando intentaban contener las llamas con maquinaria pesada en Nogarejas y en el municipio de Quintana y Congosto. A estas tres personas muertas ha de añadirse el hombre que fallecía el pasado martes en el incendio Tres Cantos, tras sufrir quemaduras en más del 90% de su cuerpo.

El fuego cerca de los Picos de Europa

La provincia de León vive uno de los peores veranos en décadas. El delegado territorial de la Junta, Eduardo Diego, ha calificado de “muy complicada” la jornada de este domingo , marcada por la evacuación de 62 localidades (32 más que a primera hora de la mañana) y por un número de desalojados que ya supera las 2.000 personas. Son nueve los incendios permanecen en nivel 2 y otros dos en nivel 1, lo que ha llevado al operativo de extinción a trabajar al límite de su capacidad, condicionado además por las rachas de viento. “Hemos tenido vientos muy elevados, variables, difíciles de controlar, que incluso han puesto en riesgo al propio personal, con cuadrillas que han tenido que ser rescatadas”, ha advertido.

Diego ha detallado que la situación se ha recrudecido especialmente en Fazgar y Oencia, donde las brigadas de Medio Ambiente permanecieron junto a los vecinos para tratar de defender el núcleo urbano. También ha señalado el incendio del Valle de Valdeón y el que afecta al término de Barniedo de la Reina, que ha obligado a desalojar toda la vertiente de La Reina. Además, preocupa el incendio que ha entrado desde Ourense, en Galicia, al que ha definido como “una tormenta de fuego” alimentada por las fuertes rachas de viento.

El delegado ha alertado además del avance del incendio desde Porto, en Zamora, hacia Encinedo y de las complicaciones que se están viviendo en Anllares, Almanza, Llamas de Cabrera u Orayo, con momentos de “gran dificultad” a lo largo de la tarde. La humareda cubre ya buena parte de la provincia y llega, incluso, hasta la capital, lo que ha llevado a recomendar el uso de mascarillas a quienes tengan problemas respiratorios. Con este escenario, Diego ha reiterado la petición hecha por el presidente autonómico al Gobierno central para que movilice más medios militares: «Se trata de una situación de país y necesitamos que se pongan a disposición medios del Ejército para reforzar el operativo que se deja la piel desde hace diez días en la lucha contra estos incendios”, ha insistido.

Galicia, en cifras históricas

Galicia encara una de las peores oleadas de incendios de su historia reciente. Según la Consellería do Medio Rural de la Xunta de Galicia, el fuego ha arrasado ya más de 59.000 hectáreas en la comunidad, con tres focos que figuran entre los más grandes de los que se tiene constancia. El más extenso sigue siendo el de Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, que suma 17.500 hectáreas calcinadas en las parroquias de Requeixo, Parafita y Mormentelos. 

A ese desastre se han unido los fuegos de Oímbra y Xinzo de Limia, convertidos en un único frente de 12.000 hectáreas que avanza sin control. Está también el de Larouco, con otras 12.000 hectáreas calcinadas en la parroquia de Seadur y que ya se ha entrado en el territorio de Castilla y León. Son incendios que, por su magnitud, figuran en la lista negra de los más devastadores registrados en Galicia.

La provincia de Ourense concentra la mayor parte de los incendios. Allí, continúan activos el de A Mezquita, con 10.000 hectáreas; el de Maceda, con 3.000 tras unirse los frentes de Santiso y Castro de Escuadro, o los de Vilardevós, repartidos en varias parroquias, que suman alrededor de 1.500. Otros frentes que preocupan son los que afectan a Carballeda de Avia y Beade, con 2.500 hectáreas, y San Cibrao das Viñas, con 60. Al mismo tiempo, se han podido estabilizar los fuegos que afectan a los municipios de Agolada, Cervantes, O Saviñao, Muxía y Montederramo, mientras que los de Toques, A Fonsagrada y Verín se mantienen controlados. Dos han quedado extinguidos: el de Dozón, con 300 hectáreas, y el de A Estrada, con apenas 28.

Extremadura, Asturias y Andalucía, bajo presión

En el norte de Cáceres, el incendio de Jarilla cumple ya seis días activo y ha devorado más de 11.000 hectáreas. El avance de las llamas amenaza con saltar la frontera provincial hacia Salamanca y mantiene en vilo a la comarca. El Centro de Urgencias y Emergencias levantó este domingo el confinamiento en Casas del Monte y Segura de Toro, pero en Hervás (una localidad de 4.000 habitantes que duplica su población en verano), la orden sigue vigente. El Puesto de Mando Avanzado se mantiene en La Granja, desde donde la Junta de Extremadura coordina los trabajos de un dispositivo que lucha contra un frente alimentado por el viento y las altas temperaturas.

Más al norte, Asturias resiste con siete incendios activos y un ambiente de aparente tregua. El consejero de Emergencias, Alejandro Calvo, ha explicado que la situación evoluciona de forma “más favorable”, aunque la comunidad sigue en el nivel máximo de alerta. El suroeste del Principado concentra la mayor intensidad, con fuegos en Somiedo, Cangas del Narcea y Degaña, mientras que en Ponga, Cabrales y Quirós siguen ardiendo focos que han cruzado desde León. La humareda llega a concejos como Caso y a aldeas de alta montaña, donde los bomberos trabajan a gran altitud y pendientes pronunciadas.

Las alarmas han vuelto a encenderse en Huelva con un incendio que se ha declarado en el paraje de La Contienda, en Aroche, apenas un día después de que se diera por extinguido otro fuego en la misma zona, que arrasó con 500 hectáreas. El Plan Infoca ha mantenido toda la noche un amplio dispositivo con cuatro autobombas, siete grupos de bomberos forestales, cinco buldóceres, así como unidades médicas y meteorológicas. El incendio, declarado por la tarde, obligó a movilizar hasta 13 medios aéreos, entre ellos seis aviones de carga en tierra y helicópteros, más allá de una veintena de técnicos y brigadas.

No es el único frente abierto en la provincia. En Bonares, el incendio del paraje de El Corchito quedó estabilizado en la jornada del domingo, lo que permitió a la Junta desactivar el plan de emergencia regional. Durante la tarde la falta de visibilidad obligó a cortar la autovía A-49, pero el avance de las llamas quedó finalmente controlado. 

Tren y carreteras, también interrumpidos

La alta velocidad entre Madrid y Galicia seguirá suspendida este lunes, 18 de agosto, acumulando ya cinco días consecutivos de interrupción. “El panorama no cambia a mejor. Mañana tampoco tendremos servicio en la LAV Madrid-Galicia”, ha escrito el ministro de Transportes, Óscar Puente, en un mensaje publicado en X poco antes de la medianoche. Adif había informado horas antes de que la circulación estaría paralizada “al menos hasta mediodía”, pero la situación de los incendios en Ourense ha obligado a prolongar la suspensión de todos los trenes entre Sanabria y Ourense.

Para paliar el corte, Renfe ha anunciado la puesta en marcha de varios trenes especiales entre Madrid y Zamora durante la jornada de este lunes. Los servicios saldrán de la capital a las 7.14, 13.20 y 20.23 horas, y regresarán desde Zamora a las 8.40, 14.36 y 22.00. En paralelo, la compañía mantiene la posibilidad de anular o cambiar sin coste los billetes de los trenes suprimidos. También permanecen cerrados los tramos de la red convencional Zamora–A Coruña y Palencia–A Coruña, entre Ponferrada y Monforte de Lemos

El fuego ha afectado también a la red de cercanías de vía estrecha. La línea de FEVE que une León con Bilbao está interrumpida en el tramo comprendido entre Puente Almuhey y Guardo, según ha confirmado la Delegación Territorial de la Junta.

Las carreteras tampoco se libran del avance de las llamas. La Dirección General de Tráfico ha confirmado que dieciséis vías permanecen cortadas esta madrugada en España, una de ellas de carácter nacional: la N-621 entre Portilla de la Reina (León) y Vejo (Cantabria). El resto son carreteras secundarias de Asturias, León, Palencia, Zamora, Cáceres y Ourense. En la provincia leonesa, el fuego ha obligado a interrumpir la circulación en la LE-164 entre Yebra y Llamas de Cabrera, en la LE-2703 entre Portilla y Santa Marina de Valdeón y en la LE-5228 entre Salas y Bouzas. En Huelva, el incendio de Bonares llegó a cerrar durante horas la A-49, mientras que en Aroche las llamas de La Contienda mantienen interrumpida la HU-8100 desde el jueves. A los problemas de movilidad se ha sumado la caída de las telecomunicaciones en varias localidades de El Bierzo, aunque la cobertura se ha recuperado en Puente Domingo Flórez, Castroquilame y Pombriego.