Con solo 18 años, Sergio Sánchez ha tocado la cima del balonmano juvenil internacional. El jugador del Abanca Ademar León ha sido nombrado mejor extremo izquierdo del Campeonato del Mundo Juvenil, celebrado en Egipto, tras una actuación brillante con la selección española, que se colgó la medalla de plata en una final agónica decidida por penaltis ante Alemania.

MVP en dos encuentros

El leonés ha sido uno de los jugadores más determinantes del torneo. Anotó 31 goles en 41 lanzamientos, con una efectividad notable y una regularidad que lo situaron como el cuarto máximo goleador del combinado nacional. Más allá de las cifras, su rendimiento global fue impecable: fue elegido MVP en dos encuentros, incluida la exigente semifinal, y se consolidó como una pieza clave tanto en ataque como en defensa.

Reconocimiento en el ‘7 ideal’ del campeonato

En la final, volvió a brillar con cuatro tantos, aunque la gloria se escapó en la tanda de penaltis. A pesar del desenlace, el nivel mostrado a lo largo del campeonato le valió la entrada en el ‘7 ideal’ del torneo, siendo elegido como el mejor extremo izquierdo del mundo en su categoría.

La gran apuesta del Ademar

Este logro llega en un momento decisivo para su crecimiento deportivo. Este verano, el Ademar logró renovar su contrato hasta 2028, apostando por él como uno de los pilares de su futuro. Pese al interés de otros clubes, Sergio decidió seguir creciendo en León, en el club donde se formó y que siempre ha confiado en su potencial.

Una decisión que no ha sido sencilla, especialmente porque Sánchez comenzará este año la carrera de Medicina en la Universidad de Valladolid, lo que implicará un importante esfuerzo para compaginar los estudios con el alto nivel competitivo.

El nombramiento de mejor extremo izquierdo del Mundial juvenil confirma a Sergio Sánchez como una pieza clave en el futuro del balonmano español y refuerza la apuesta del club marista por seguir formando talentos de primer nivel.