Madrid
Quentin Tarantino, uno de los directores más influyentes del cine contemporáneo, ha compartido en una entrevista en el pódcast The Church of Tarantino sus reflexiones más íntimas sobre su carrera, sus películas y su futuro como cineasta. A sus 62 años, el director de Pulp Fiction y Reservoir Dogs ha desvelado cuál considera su mejor película, su favorita y la que siente que estaba destinado a realizar.
«Érase una vez en Hollywood es mi favorita, Malditos Bastardos es la mejor», afirmó Tarantino. «Pero creo que Kill Bill es la película definitiva de Quentin, como que nadie más podría haberla hecho. Cada aspecto está particularmente arrancado, como con tentáculos y tejido sangriento, de mi imaginación, mi id, mis amores, mi pasión y mi obsesión. Así que creo que Kill Bill es la película que nací para hacer, creo que Malditos Bastardos es mi obra maestra, pero Érase una vez en Hollywood».
El director también se refirió a sus guiones, destacando que Malditos Bastardos es el mejor que ha escrito, seguido de cerca por Los odiosos ocho y Érase una vez en Hollywood. «Hay un aspecto de Los odiosos ocho que creo que probablemente sea mi mejor dirección de mi propio material. Es decir, el material está escrito y es sólido. No tengo que crearlo como en Kill Bill, está ahí, y creo que es mi mejor servicio como director a mi propio guion».
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A pesar de su cariño por Érase una vez en Hollywood, Tarantino ha decidido no dirigir su secuela, The Adventures of Cliff Booth, que será realizada por David Fincher para Netflix. Tarantino, sin embargo, permanece como guionista y productor del proyecto. «Creo que David Fincher y yo somos los dos mejores directores», dijo. «Así que la idea de que Fincher quiera adaptar mi trabajo demuestra un nivel de seriedad hacia mi obra, que creo que debe tomarse en cuenta».
La decisión de no dirigir la secuela responde a su deseo de que su décima y última película sea un proyecto completamente nuevo. «Me encanta este guion, pero sigo caminando por el mismo terreno que ya recorrí», explicó. «Simplemente no me entusiasmaba. Esta última película, tengo que no saber lo que estoy haciendo otra vez. Tengo que estar en territorio desconocido«.
Antes de embarcarse en su último filme, Tarantino está trabajando en una obra de teatro que se estrenará en el West End de Londres en 2026. Su compromiso de retirarse tras su décima película sigue firme, como ha reiterado en varias ocasiones: «La mayoría de los directores tienen películas finales horribles».