En mayo último se cumplieron 10 años del funcionamiento del grupo “Valientes Necochea”, del que forman parte personas con discapacidad (jóvenes de diversas edades) practicando golf adaptado. Con la coordinación de Jimena Martín (ayudante terapéutica) y el aporte de Gonzalo Ortíz (profesor) se pudo concretar ese proyecto, al que el Necochea Golf Club le dio su aval, brindándole un fuerte respaldo, cediendo sus links de Quequén para su desarrollo
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“Sin ser golfista, elegí ese deporte, que siempre me gustó y que se practica al aire libre, para llevar adelante este proyecto destinado a la inclusión de los chicos. No sólo se convierte para ellos en una actividad recreativa, sino también en un deporte que requiere mucha concentración, de modo que también se relaciona con lo mental”, explicó Jimena Martín.
Entrevistada en el programa televisivo “El Ciudadano” (que puede verse en Youtube, donde queda alojado), la ayudante terapéutica le brindó importancia también al lugar en el que se juega al golf, con un entorno muy natural donde reina el silencio en medio del césped prolijamente cortado y las plantas existentes en el predio.
AdsJimena Martín es la coordinadora de “Valientes Necochea”
Los alumnos de esta escuela de golf adaptado se van renovando, aunque hay algunos que permanecen desde su inicio. Jimena destaca, entre ellos a Juan Pedro, a quien ella, además, acompaña al gimnasio al que concurre durante la semana. Los sábados asisten al Necochea Golf Club chicos de Lobería y otros lugares de la zona.
Por supuesto, lo fundamental es que puedan recrearse e integrarse a través de este deporte. Pero algunos de ellos también compiten, ya que se ha creado una categoría, que es golfistas integrados.
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“Quienes por sus condiciones y práctica pueden participar en forma competitiva, logran niveles de superación personal. A mayor constancia y perseverancia, van logrando cambios positivos. Otros, en cambio, lo hacen de manera más recreativa”, apuntó la coordinadora.
Relación con los padres
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Concurrir a esta escuela de golf adaptado, además, posibilita que estos jóvenes puedan enfrentar temores, que muchas veces está más en los padres que en ellos mismos, según reflexionó Jimena, aludiendo a una natural sobreprotección en la que, en algunos casos, se incurre. A modo de ejemplo, indicó que pueden compartir espacio y actividades con otros chicos, pedir un café en la confitería del club u otra cosa que habitualmente no realizan en su casa.
“Trabajamos mucho en lo que es la autonomía de los chicos, en tratar de soltarlos un poquito de mamá y papá. Yo invito primero a los padres a que me acompañen, hasta que llega un momento en que los propios chicos les sugieren que se vayan, para quedarse conmigo y los otros chicos”, reveló.
En algunos casos, son más directos. “Dejame con Jimena, andate a la confitería o a caminar”, suelen decir.
La ayudante terapéutica observa que en ese momento los chicos “se sienten totalmente relajados, en un espacio muy abierto”, viviendo algo diferente a su cotidianeidad. .
Es vital el rol que cumple Gonzalo Ortíz como profesor de golf. “El nos está integrando a la escuela de menores. Es una hora que están bajo sus directivas. Posteriormente tienen un tiempo libre, en el que están conmigo”, indicó.
Para Jimena esta experiencia, tanto en lo profesional como en lo personal, es algo que le produce “una gran felicidad: ojalá pudiera estar todos los días allí, más cuando llega el tiempo lindo, es un entorno muy agradable, todo verde, pleno de naturaleza”.
Tras expresar su agradecimiento al Necochea Golf Club por posibilitar el funcionamiento de esta escuela en forma sostenida durante estos 10 años, subrayó que la actividad no se detiene en vacaciones. A tal punto que tanto en julio como en los meses de verano se suelen sumar transitoriamente alumnos provenientes de otros lugares, cuyos padres pasan sus vacaciones en Necochea y Quequén.