Mikel Erentxun (Caracas, 1965) es un de los músicos españoles que han logrado llevar una trayectoria más coherente a lo largo de sus cuarenta años de carrera. Con apenas 19 años formó Duncan Dhu junto a Diego Vasallo y Juan Ramón Viles. … Aquel trío se redujo luego a un dúo tras la marcha de Viles y se convirtió en un referente dentro del pop nacional. Paralelamente a esto, Erentxun comenzó a partir de 1993 una etapa en solitario que ahora vive una etapa de madurez después de haber publicado discos tan aplaudidos por la crítica y el público como ‘Septiempre’. Este domingo actuará en Tío Pepe Festival dentro de la gira Duncan Dhu Tour 2025, con la que está celebrando cuatro décadas de esta banda. En la Bodega las Copas de Jerez de la Frontera, Erentxun repasará grandes éxitos y otros temas menos conocidos de este conjunto.
—¿Había actuado antes en Tío Pepe Festival?
—Es la primera vez que actúo. Me han hablado muy bien del festival. Además, me encanta Jerez. Es una ciudad preciosa.
—¿Qué diferencia al público del sur con respecto al del norte?
—El público andaluz en general es más caliente. Se nota por el calor que hace. El del norte es un poco más introvertido. Es una gozada tocar aquí en Andalucía.
—Han pasado cuarenta años de Duncan Dhu, ¿cómo vivió el nacimiento del grupo?
—Ya es historia. Ocurrió hace tanto que forma parte casi de una memoria olvidada. Es increíble que aquello que empezamos tres chavales en San Sebastián, sin ningún ánimo de lucro, fuera creciendo tanto. De repente, un día nos dimos cuenta de que se convirtió en nuestro oficio. Había mucha frescura, inocencia y juventud. Lo recuerdo con mucho cariño. Éramos un poco los raros de la clase. En vez de hacer deporte, queríamos hacer música. Mis hermanas mayores tenían tocadiscos. Mi padre tocaba el piano, había también una guitarra en mi casa. Eran todo facilidades. La música está en mi casa desde que tengo uso de razón. La educación que uno tiene es fundamental. Lo que uno escucha de niño te marca para toda la vida. Yo nací escuchando a los Beatles, Lou Reed, David Bowie, Cat Stevens, Simon & Garfunkel… Mi preferido era Elvis Presley. Quería ser como él. Es culpable de que me dedique a la música. Empecé de hecho tocando las canciones de Elvis. Este es fundamental por la estética y por ese punto de rebeldía. Luego ha habido artistas que me han influido más, como los Beatles o Bob Dylan.
—¿Se planteó en algún momento haber hecho esta gira con Diego Vasallo?
—Cuando surgió la idea y nos dimos cuenta de los cuarenta años del nacimiento discográfico de Duncan Dhu, lo hablé con Diego, pero no le motivaba. Él está con su nuevo disco y me dijo que saliera yo solo como Duncan Dhu. Esta es una gira de Mikel Erentxun haciendo las canciones de Duncan Dhu. Se parece mucho, pero no es Duncan Dhu. La gira está funcionando muy bien porque mezclo canciones muy conocidas con otras que no son tanto. No es un mero karaoke. Toco canciones que no se conocen de Duncan Dhu o que nunca han sonado en un escenario. He logrado tocar un repertorio que suene muy bien. Hay temas de ‘Crespúsculo’, un disco que nunca tuvo una gira. También toco canciones de ‘Autobiografía’, un doble álbum al que le tengo mucho cariño y no es tan conocido. ‘Crepúsculo’ tiene clásicos como ‘Siempre’, ‘Desnuda’ o ‘Y la tarde está muriendo’. La gente agradece no sólo escuchar los clásicos, sino los temas menos conocidos. Tenemos unas 200 canciones.
—¿Qué le parece que los Beatles hicieran más de 250 canciones en menos de 10 años?
—Lo de los Beatles es increíble, ya que no hay ningún grupo que hiciera tantas canciones y tan distintas en menos tiempo.
—¿Se imagina un biopic de Duncan Dhu?
—He visto este año el biopic de Bob Dylan y me ha encantado. También me gustó ‘En la cuerda floja’, el biopic de Johnny Cash. Nosotros no somos tan importantes para que saliera una película. En cuarenta años han pasado muchas cosas interesantes, pero una película sobre nosotros sería muy aburrida.
—¿En qué se diferencia ese Mikel Erentxun de 1985 al de 2025?
—Tengo cuarenta años más. Me he casado dos veces, tengo cinco hijos, he estudiado la carrera de arquitectura y he viajado por todo el mundo. En 1985 me caracterizaba la inocencia. Ahora soy una persona más madura. Me arrepiento de pocas cosas en mi vida. Si empezara de nuevo, lo haría todo prácticamente igual. En el terreno profesional estoy muy contento por mi carrera con Duncan y en solitario. Además, he recibido el Premio Ondas hace dos años. Uno tiene miedo de convertirse en una caricatura o en un dinosaurio, pero con 60 años estoy más vivo que nunca. Esta gira es un paréntesis en mi carrera musical porque estoy escribiendo nuevos temas.
—Sus últimos dos discos, ‘Septiembre’ y ‘Navidad’, tienen un profundo sello de autor.
—Efectivamente. Esa es la prueba de que sigo investigando. ‘Septiembre’ es un disco doble donde toqué el piano por primera vez en mi vida y lo grabé con un equipo de gente muy joven. ‘Navidad’ se centra en la Navidad, pero se puede escuchar todo el año. Ya estoy preparando un nuevo disco totalmente distinto a ‘Septiembre’. La gira de Duncan Dhu es muy visceral, pero tengo la mente muy libre para escribir canciones para el nuevo disco. Imagino que cuando lo haga me encontraré con muchos nuevos temas donde poder elegir. Grabar discos de Navidad es una tradición anglosajona. En España los discos de Navidad no forman parte de la tradición del rock&roll. Raphael tiene varios álbumes navideños, pero no era habitual que un artista como yo hiciera un disco así. Sólo hicimos un concierto en Madrid el pasado 23 de diciembre y fue un éxito. Este año tocaré de nuevo el 23 de diciembre en Madrid y meteré alguna canción nueva. Quiero que este concierto de Navidad en Madrid se convierta en una tradición.