Abrazo guardado, libro-álbum con textos de Verónica Parodi e ilustraciones de Istvansch, tiene un extenso recorrido porque surgió hace cinco años, en el momento más álgido de la pandemia. «Escribí las canciones y los poemas que forman parte del libro en esa época entonces tienen un ritmo particular, muchas palabras que andaban dando vueltas en esos días y las ganas profundas de estar con nuestros seres queridos», recuerda la autora sobre el germen de un proyecto que finalmente se materializó gracias a Del Naranjo, sello que aloja buena parte de su obra.

Este domingo a las 17, El Alambique (Griveo 2350) se convertirá en punto de encuentro de varias expresiones artísticas: habrá literatura, música, ilustración e intervenciones en vivo en un evento destinado a público de todas las edades que contará con la participación especial de la cantora popular Chiqui Ledesma y la música Emilia Parodi, y estará coordinado por la periodista especializada en Literatura Infantil y Juvenil Karina Micheletto.

Parodi cuenta que al principio se trataba de «una aventura para reconectar» pero no sabía muy bien en qué terminaría esa idea. Primero se contactó con Istvansch, ilustrador, diseñador y escritor con quien tenía ganas de trabajar desde hacía tiempo. «Lo quiero y lo admiro profundamente, entonces le comenté mis ganas de generar un proyecto en común», dice. También se contactó con su «amiga-hermana», Chiqui Ledesma, a quien define como «una gran intérprete de nuestra música popular» y explica: «Fue un proyecto que nos mantuvo con mucha ilusión porque eran tiempos difíciles, de mucha incertidumbre. Me dio el abrazo que estaba necesitando».

Las canciones que Parodi escribía en su casa viajaban a través de WhatsApp hacia las casas de Ledesma e Istvansch, quienes trabajaban sobre ese primer material y lo convertían en algo nuevo. Un puente entre literatura, música e ilustración. «Vero me invitó a colaborar en el proyecto, me mandó la propuesta en plena pandemia y me encantó esto del libro de nanas. Le dije que sí y nos pusimos a generar ese ida y vuelta. Me gustó mucho el juego, creo que eso fue central. Éramos distintos artífices de una misma obra trabajando en casa: quien hace la música, quien escribe, quien canta, quien dibuja, quien masteriza, quien edita», enumera el ilustrador, y recuerda que durante la pandemia estuvo muy encerrado (su primera salida oficial fue en 2022).

Istvansch define sus creaciones para el libro como «escenografías o pequeñas instalaciones hechas en distintas partes de la casa: la habitación, el balcón, el baño, el living». En ese proceso, dice, descubrió que venía juntando una gran cantidad de basura; gracias a una alquimia virtuosa, todo eso se convirtió en material precioso para elaborar estas piezas. «Fue muy divertido hacerlo», comenta, y destaca el valor de la materialidad: «Es un libro tan físico que es irreproducible en digital, se necesita el libro en papel para entender cómo funciona, para que el lector se dé cuenta de lo que está leyendo y pueda acceder a ese universo. El libro es mágico porque, al dar vuelta las páginas, la sensación es que accedés a un mundo donde se desdibuja la frontera entre lo real y lo imaginado«.

La obra está atravesada por una impronta artesanal. En el caso de la música, Parodi le enviaba las letras a Ledesma, ella componía las canciones y Roberto (hermano de la cantante) las masterizaba y se las reenviaba desde España. «Las grabaciones son exactamente como las hicimos en ese tiempo y las ilustraciones de Istvansch también porque fueron hechas adentro de su casa, él dibuja con tijera en tercera dimensión», comenta Parodi. «Debo ser uno de los poquísimos que sigue trabajando todo en papel porque no hay nada digital en mis procedimientos, sólo la foto –apunta el ilustrador–. Las imágenes están sacadas con celular porque el juego era usar los elementos que había en casa, lo que teníamos a mano. Todos mis dibujos se pueden exponer porque no hay nada después de los papeles. Lo increíble es que en este momento de gran digitalización e IA, quienes trabajamos con los materiales de siempre tenemos una enorme oportunidad: yo pasé a ser ‘lo raro’ con mis recortes y mis collages».

Parodi sostiene que Abrazo guardado puede pensarse también como «un libro muy actual porque trae amorosidad y belleza«. Consultada por la resonancia del título en este contexto, declara: «Todo lo que tiene que ver con la ternura y el arte es muy necesario siempre, pero sobre todo en este momento. El abrazo es muy necesario, no sólo entre niños y adultos sino entre todos. Es un tiempo hostil porque estamos viviendo mucho odio y los chicos están muy metidos en lo tecnológico. Este libro ofrece otra manera de ver el mundo para conectarse desde otro lugar».

El encuentro de este domingo también tendrá ese espíritu. La escritora adelanta que compartirán canciones y poemas, Istvansch ilustrará en vivo (además se sorteará entre el público un original hecho especialmente para el evento), habrá una muestra con los dibujos originales del libro para ver el proceso creativo, estará el stand de Del Naranjo con los ejemplares y además habrá unas ricas tortas elaboradas por la propia Parodi, chocolate caliente y café para quien guste: «La idea es que sientan que están llegando a mi casa. Queremos tomarnos el tiempo para compartir un poco de ternura porque la canción de cuna es para todas las edades. Y nadie es el mismo después de escuchar una canción de cuna». 

Sobre su vínculo personal con ese género, Parodi asegura que forma parte de su identidad y sus primeras memorias. «Me cantaban mis abuelas y me cantaba mi mamá. Siempre me vuelven esas canciones que ellas me tarareaban antes de ir a dormir. La nana trae una parte de lo que somos», dice, y anticipa que en el evento presentará algunos de sus clásicos y también parte de lo nuevo. En la propuesta intervienen actores y espacios que alimentan el campo cultural de manera muy activa. Parodi los piensa hoy como «una trinchera necesaria para transitar este tiempo, para defender la cultura, el arte y la manera en que nos queremos plantar en el mundo, para pensar la manera de transformarlo». En relación a la coyuntura, la autora dice que «es un tiempo muy difícil» pero recuerda que «pasamos muchas tormentas» y rescata el valor de lo colectivo para «hacernos más fuertes».

*Abrazo guardado se presentará este domingo a las 17 en El Alambique (Griveo 2350) y las entradas están disponibles por Alternativa Teatral.