Piedad Alba Pavón es natural de Iznájar, en la Subbética Cordobesa, donde se formó en el CEIP Nuestra Señora de la Piedad y luego en el IES Mirador del Genil hasta cuarto de la ESO. El Bachillerato, por tanto, lo estudió en Rute, en esa misma comarca, como el resto de chavales y chavalas que quieren continuar estudiando, en el Nuevo Scala. Para ello tenía que viajar ida y vuelta a diario en autobús entre ambos municipios.

Posteriormente se marchó a estudiar Bioquímica en la Universidad de Málaga (UMA), porque buscaba una universidad relativamente cerca de casa y porque la vida en Málaga es también atractiva. Optó por hacer Bioquímica, aunque cuando se marchó a Málaga «casi ni sabía lo que era». Su intención era estudiar una carrera relacionada con el ámbito sanitario, al margen de Medicina y Enfermería, y en los últimos años de instituto se empezaron a hablar de otras carreras, como Bioquímica o Biotecnología, «y eso me llamó la atención».

La decisión final por la Bioquímica fue por su idea de «estudiar al ser humano, desde lo más pequeño», a escala microscópica, desde las células. «Quería saber cómo se comportan las células en los tejidos y el cómo funciona nuestro cuerpo». Pero bioquímica es investigación pura y dura, ¿no? Pues sí, la mayor parte sí. Claro.

Se trata de una carrera de investigación pura y dura, pero eso era lo que le llamaba: Trabajo de laboratorio, que etimológicamente significa ‘lugar de trabajo’, y su elección se encaminó hacia la investigación del cáncer pediátrico hasta terminar a día de hoy formando parte del Grupo de Oncología Pediátrica del Instituto de Investigación Sanitaria Biobizkaia, en Bilbao.

Y si hemos llegado hasta ella para hacerle esta entrevista ha sido gracias a un evento que tuvo lugar ayer, sábado, en Iznájar (Subbética Cordobesa), ‘Brindis por la esperanza’, un evento solidario a beneficio de la investigación del cáncer infantil en ese instituto.

La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural
La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural

Una cosa es la investigación médica en plan genérico y otra bien distinta es ya meterse en lo del cáncer. ¿Qué le llevó a ello?

Es verdad que el cáncer es una enfermedad que siempre me había llamado la atención y fue un poco por todos los casos que vemos y que conocemos o que tenemos cercanos. Y es una de las enfermedades más prevalentes y más duras.Ya en la carrera había asignaturas enfocadas a enfermedades y las asignaturas específicas de cáncer. Y a mí cada vez me gustaba más eso. Me fui a Barcelona a hacer un master y allí empecé a conocer lo que era el cáncer infantil.

Aunque parezca una obviedad, ¿por qué se distingue entre el cáncer adulto y cáncer infantil? ¿Qué es lo que tienen de diferente?

Son enfermedades diferentes sobre todo a la hora de ver de dónde vienen o por qué se generan. La pregunta que yo me hacía era, si el cáncer es una enfermedad que se asocia al envejecimiento y que se asocia al estar en contacto con agentes que puedan ser cancerígenos y que vienen de esas células que se van multiplicando y que en algún momento fallan, por ejemplo por asociación al envejecimiento, ¿cómo puede pasar eso en los niños?

¿Y por qué es, entonces?

El cáncer en los niños está más asociado a un error celular durante el desarrollo, por ejemplo. He estado estudiando el sarcoma, que son un tipo de cáncer que puede salir en el hueso y en los tejidos blandos, y se comprueba que, por ejemplo, es más frecuente en la edad en la que los niños y las niñas dan el estirón.

Y en algunos casos pasa que hay un error a nivel genético que provoca que esas células que se están desarrollando y que están creciendo tan rápido para formar los huesos, en algún momento fallan y dan lugar a un tumor. Esto, por suerte, es súper poco frecuente.

¿Al ser genético, está preconcebido, entonces?

Hay algunos casos en los que sí y otros en los que no. Eso también pasa en los adultos.

¿Y qué es lo que dispara la aparición de un cáncer? ¿Cuál es el paso para que una célula se vuelva loca y empiece a crecer de forma incontrolada?

Tienen que pasar muchísimas cosas. No es sólo un paso, sino un acúmulo de eventos que ocurren. Primero hay un fallo, y nuestro cuerpo tiene mecanismos para eliminar células fallidas. No deja que crezca esa célula, pero es que también tiene que fallar ese paso de eliminar a esa célula.

Por tanto, son varios pasos que fallan y que hacen que una célula que se está reproduciendo más rápido de lo que debería y de forma más agresiva, nuestro cuerpo no la haya eliminado y pueda seguir creciendo para acabar formando lo que es el tumor.

La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural
La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural

Entonces, ¿el sistema inmunitario es capaz de eliminar células que empiezan a crecer en exceso?

Sí.

Entonces, ¿de forma natural elimina el cáncer?

Bueno, a eso nosotras no lo llegamos a llamar cáncer, porque no se llega a formar. Nuestro cuerpo, de forma natural, elimina células que están dañadas o que tienen algún error y están creciendo de forma extraña. Así que de forma natural esto ocurre en nuestro cuerpo, porque en caso contrario eso podría suceder mucho.

Pero hay casos en los que esto falla y se dan más eventos y sí que esa célula se sigue multiplicando y sí que da lugar a lo que llamamos el cáncer. Es cuando nuestro cuerpo no ha sido capaz de eliminarlo por todos los mecanismos que tiene.

Vamos, que hay gente que ha evitado de forma natural la posibilidad de tener cáncer.

Bueno, sí. Tampoco lo diría así. Nuestro cuerpo está preparado para eliminar los errores que puedan ir ocurriendo. O también eliminar células que están infectadas por virus o por bacterias. Eso ocurre de forma natural en los cuerpos.

¿En que consiste la investigación que llevan a cabo en Bilbao? Porque es de suponer que atacan varios campos, ¿no?

Exacto. Nuestro grupo es específico de investigación en cáncer pediátrico y básicamente estamos especializados en varios tipos de cáncer pediátrico. Nuestra investigación está muy asociada a la clínica, es decir, trabajamos mucho con el equipo médico, con las enfermeras y con muestras de los propios pacientes del hospital, incluso de otros centros hospitalarios. Entonces, nuestra investigación básicamente se basa en hacer estudios a nivel genético para entender mejor estas muestras tumorales con las que trabajamos.

¿Qué información podemos sacar de los estudios genéticos que hacemos? Pues sacamos información sobre el tipo de cáncer que es, el riesgo que tiene, es decir si es más agresivo o menos agresivo. Podemos sacar información también de un cáncer con origen genético, o sea de una predisposición genética a tener cáncer, y también intentamos sacar información sobre qué tratamiento o qué mecanismo pueden ser útiles para ese tipo de tumor a la hora de tratarlo, qué cosas pueden ser eficaces. Eso es un poco, a nivel general, lo que hacemos.

Trabajamos, por ejemplo, con el meduloblastoma, que es uno de los tumores cerebrales más frecuentes, trabajamos también el sarcoma, que son tumores que pueden venir de los huesos o del músculo, y también trabajamos con el leucemias infantiles, que es el cáncer más frecuente en la edad pediátrica.

¿Ah, sí?, ¿por qué?

La verdad es que eso no lo sé. Creo que tiene que ver con el desarrollo, porque al final las células de la sangre se forma en la edad pediátrica, y entonces al final es donde puede haber más fallos porque es donde las células se están desarrollando.

¿Y es muy común la leucemia infantil?

No, realmente el cáncer pediátrico no es común, por suerte. De hecho, se dice que es una enfermedad rara, porque cumple los criterios para serlo. Es verdad que la leucemia es la más común.

La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural
La investigadora Piedad Alba Pavón, en Iznájar, de donde es natural

Antes ha hablado ‘del hospital’, pero me gustaría que nos contara un poco más sobre el instituto donde están trabajando.

Claro. Nosotras trabajamos en el Instituto de Investigación Sanitaria Biobizkaia, que es un centro de investigación asociado al sistema sanitario, al Servicio Vasco de Salud, Osakidetza. Este instituto, la verdad es que es bastante nuevo, empezó a funcionar funciona desde el 15 de enero de 2015, pero ha ido creciendo mucho a lo largo de los últimos años. Yo llevo allí ocho años. Básicamente se centra en estudiar enfermedades y nuestro centro está dentro del recinto hospitalario. Eso nos facilita mucho, por ejemplo, a la hora de trabajar con muestras y con pacientes.

¿Con qué hospital, en concreto?

Estamos dentro del recinto hospitalario del Hospital de Cruces.

¿Y allí qué pasa?, ¿están especializadas en el tema de cáncer? Lo digo porque cada hospital tiene casi una especialidad: El Reina Sofía de Córdoba es referente en trasplantes, el Virgen del Rocío de Sevilla, en quemados…

Sí, es verdad que a nivel de cáncer pediátrico tiene una unidad bastante potente. Realmente es como la unidad de referencia del cáncer pediátrico en Euskadi. Hay también una unidad en Donosti, que colabora con nosotros directamente y trabajamos también mucho con Cantabria.

¿El cáncer pediátrico se da más en el Norte o qué?

No, no. ¡Qué va! (se ríe). Como te he contado antes, el cáncer pediátrico, por suerte, es poco común y poco frecuente, y las unidades que trabajamos en cáncer pediátrico estamos muy conectadas entre sí. Porque, por ejemplo, de un tipo de cáncer pediátrico en un hospital, igual al año ves tres casos.

Entonces, los hospitales están muy conectados entre sí, porque el personal sanitario nos vamos especializando en cada uno de los tipos de cáncer que hay. Por ejemplo, en nuestro grupo trabajamos como centro de referencia del meduloblastoma, y, entonces, todos los hospitales de España nos contactan cuando tienen un caso de meduloblastoma. Además, algunos de los estudios genéticos los hacemos nosotros y lo normal es que las recomendaciones clínicas de los casos más complejos se consulten con los centros donde son de referencia.

Aparte de eso, trabajamos mucho en red. Hacemos reuniones de grupos a nivel nacional y allí se debaten casos.

En red, vía Internet, ¿no?

Exacto. Son reuniones on-line.

¿Y no llevan a cabo reuniones también presenciales?

Sí. Los congresos son también un buen momento para juntarnos todos. Los solemos celebrar, pero esto no es tan frecuente como poder tener las reuniones on-line y podernos conectar desde cualquier parte de España.

De hecho, llevamos desde 2022 en uno de los proyectos más importantes que ha habido a nivel nacional, que se llama SEHOP-PENCIL. Se trata de conectar entre sí todos los hospitales que trabajan en materia de cáncer pediátrico. Cada centro está especializado en un tipo de cáncer, de modo que, por ejemplo, si en Sevilla están especializados en alguna técnica, pues que todos los pacientes pediátricos que necesiten que se haga ese estudio lo puedan tener simplemente mandándoles sus muestras a Sevilla o a nosotras en Bilbao, en el caso de meduloblastomas. De esa manera, todos los pacientes tienen las mismas oportunidades, estén donde estén.

¿Y eso está funcionando bien?

Sí. Estamos en marcha. Es un proyecto en lo que empezamos nueve centros y que coordinaba el hospital de Barcelona Vall d’Hebron. Nosotros somos uno de los centros en los que trabajamos a nivel de estudios genéticos y hemos empezado creando la red y ahora poniéndonos en contacto con todos los hospitales.

Y sí que está funcionando. Llevamos un montón de pacientes incluidos. Creo que ahora en verano estábamos ya por 400 pacientes. Esos 400 niños y niñas que tienen algún tipo de cáncer pediátrico y que se les ha hecho algún estudio que pueda ayudar a entender el tipo de tumor, a diagnosticarlo mejor, o incluso a ayudar en el manejo, en qué tipo de tratamiento podría tener.

¿Dentro de esa red hay alguno del Sur? ¿De Andalucía?

Sí, está en Sevilla. El Hospital Virgen del Rocio.

¿Hay alguno más?

No, pero sí que ahora todos los demás hospitales, o sea el Reina Sofía, de Córdoba el Virgen de las Nieves de Granada, el Materno Infantil de Málaga, están entrando también en la red. Ellos ya tienen contactos con esta red.

Y buen es, pero lo suyo sería que entraran y formaran parte activa de esa red, ¿no?

Sí, sí. Pero sus pacientes pueden entrar dentro de esta red.

Con lo cual, a efectos prácticos, ya están dentro.

Exacto. Pero el de Sevilla está como un centro de referencia para lo que es la Zona Sur.

¿Y tienen contacto también con el resto de Europa?

Sí. Se trabaja mucho grupos europeo y se trabaja a nivel europeo a la hora de aplicar protocolos en el funcionamiento de los tratamientos que se les da a los pacientes. Incluso se trabaja a nivel internacional. Más allá de Europa. Y se crean muchas guías europeas. Normalmente, los protocolos de tratamiento que se diseñan y que se están usando se podría decir que son muy similares a nivel de todos los países de la UE. Se intenta llegar a un consenso. Es que al final viene todo de lo mismo: Es una enfermedad en la que hay pocos casos y se intenta que todo el mundo que trabaja en eso esté en contacto para que todo se haga de la misma forma y de la mejor manera posible.

¿Lo del cáncer es evitable o es todo ya en plan paliativo?

Hombre, paliativo no es, porque algunos se curan, pero ¿evitable?

Sí, la pregunta es ¿la investigación hacia dónde tiende: Ir a la raíz y el origen para que no surja el cáncer o hacia mejorar el tratamiento?

Bueno, depende. Hay muchísimos grupos que investigan. Yo te puedo decir que nosotras trabajamos mucho en estudiar bien los tumores, en diagnosticarlos bien y en que se puedan tratar bien. Trabajamos en la identificación de aquellas personas que puedan tener una predisposición al cáncer. Conocer qué tipo de predisposición hay y qué persona o paciente lo tiene, también te permite hacerle un seguimiento e intentar prevenir la aparición o en el caso de que aparezca, porque a veces no puedes evitarlo, cómo tratarlo mejor. Lo bueno que tiene la prevención es que, en el caso de que aparezca, lo pillas en fases muy tempranas y eso significa que, de alguna forma, posiblemente va a ser más fácil poder tratarlo y poder evitar que se expanda.

¿El cáncer, que todo el mundo cree que tiene origen radiactivo, tiene alguna otra causa?

¿Las causas del cáncer? Realmente no hay una causa única. Son un acúmulo de factores. Puede ser que simplemente tú tengas algo genético que te predisponga. Obviamente, el estilo de vida es superimportante, pero tanto para esta enfermedad como para cualquier otra enfermedad.

Está claro que el cáncer se asocia a estar en contacto con agentes que son tóxicos para nosotros, como por ejemplo el tabaco. Eso está claramente demostrado. Y, aunque esas cuestiones influyen mucho, no hay una causa como tal o conocida. Es verdad que los agentes externos o el estilo de vida influyen a la hora de que pueda haber una aparición de cáncer. 

Es curioso, por ejemplo, a mí me han quitado un riñón por cáncer, por fumar, me dijeron claramente. Pero todos mis hermanos fuman y he sido yo el que ha tenido ese problema. O sea, ahí hay algo curioso.

¿Y en el caso que fuera genético, qué hace que una persona desarrolle cáncer y sus hermanos, no?

Ahí entran los estudios sobre predisposición que se hacen sobre tres generaciones familiares y ves qué tipo de cánceres hay. Normalmente en las consultas se les pregunta al paciente o a los familiares sobre la aparición de cánceres familiares. Obviamente, el tabaco es un factor, pero no es la única causa, porque todo el mundo que fuma no tiene cáncer.

Creo que tú lo has reflexionado bien. Hasta ahora lo que se sabe es que es un acúmulo de factores y probablemente de factores a nivel del cuerpo de cada uno y de sus células, que aún no conocemos y que hacen que unos sí que tenga cáncer y otro, no.

¿Con qué están exactamente ahora en su grupo de investigación?

Pues ahora estamos trabajando mucho en ese proyecto de una red nacional. Nosotras, dentro de ese proyecto, trabajamos con diferentes técnicas de secuenciación. La secuenciación es poder leer qué pone en los genes o cómo se expresan esos genes. Lo hacemos con diferentes tecnologías que nos permite en las muestras tumorales leer los genes de esas muestras y ver si hay algún fallo en esos genes dentro del tumor.

Además también trabajamos en cómo se están expresando diferentes genes que pueden estar involucrados, por ejemplo, en el crecimiento tumoral, en el desarrollo, en las características más invasivas de la célula. Son herramientas que nos permiten hacer estudios genéticos a gran escala y de cada muestra somos capaces de estudiar todos los genes.

Y luego, dependiendo de las herramientas que utilizamos para analizar estos datos, podemos clasificar mucho mejor un tumor: Yo sé que, por ejemplo, es un tipo de tumor cerebral, pero no se sabe exactamente diferenciar si es éste o aquél. Con las herramienta que tenemos ya sabemos determinar cuál es, y eso va a ayudar luego a cómo tratarlo. Se ha avanzado mucho a la hora de determinar que hay tumores que celularmente y al microscopio pueden ser muy similares, pero luego las características genéticas pueden ser diferentes.

Si las características genéticas y de cómo está funcionando esa célula son diferentes, el comportamiento es diferente. Igual va a ser uno más agresivo, o bien uno menos agresivo, pero realmente va a ser diferente.

¿Y en qué fase están de la investigación? ¿Han llegado ya a conclusiones y demás?

Bueno, hay fases de la investigación que ya lo estamos aplicando en los pacientes.

A nivel práctico, pues.

Exacto. Lo bueno es que son tecnologías muy nuevas y el hecho de aplicarlas nos está llevando ya a tener una cohorte grande de pacientes en los que se está aplicando para poder demostrar la utilidad de la técnica. Es decir que nuestro objetivo, en parte, es demostrar cuánto de útil puede ser esta técnica y para qué tipo de tumores puede ser útil, además de cómo hay que desarrollarla, en qué pasos de la técnica hemos tenido problemas o errores y cómo hemos podido solventarlos. Estamos un poco en ese punto de la investigación en la que trabajamos.

Pues están en un nivel muy avanzado.

Sí. Hay varios tipos de investigación: La básica, la clínica y la traslacional. Pues bien, el tipo de investigación que nosotros hacemos es traslacional y es clínica, porque siempre su punto de partida es investigar algo que vaya ya hacia la clínica, pero obviamente para que nosotros estemos aquí ha hecho falta que haya investigación básica detrás. Que haya gente que a nivel de laboratorio esté estudiando a nivel celular qué significa cada mutación y qué efectos tiene. Gente que hay desarrollado técnicas anteriores que nos permitan usarlas y aplicarlas a otro nivel en nuestro estudio.

Donde nosotros estamos es en la parte de traslación hacia las clínica. Pero no es un trabajo nuestro, solo de todo lo previo que se ha ido realizando y cómo se ha llevado a cabo.

Hábleme un poco del evento celebrado en Iznájar a beneficio de la investigación sobre el cáncer pediátrico.

Fue algo muy emocionante. La Asociación Centuria Romana de Iznájar decidió en su día que cada año iban a celebrar un evento en donde la recaudación se donaría a alguna causa. Ya se ha hecho para la ELA y también para los afectados de la DANA, y este año pensaron en el cáncer.

Mi padre, que forma parte de esa Asociación, y alguna gente del pueblo, ya sabían de mi labor en con cáncer infantil. Se propuso la idea en la mesa y salió adelante. Este año la recaudación va para nuestro grupo de investigación. Hablaron conmigo directamente y mis compañeras están muy, muy agradecidas y alucinando por cómo se mueve la gente de Iznájar para la recaudación de fondos. De hecho, este tipo de eventos no ha parado de crecer desde que comenzaron a montarse.

Bueno, tendrán que agradecerlo también a que usted es iznajeña. Las cosas como son.

¡Total! Yo siempre hablo mucho de Iznájar allá donde voy. Ellas nunca a han podido venir todavía por la lejanía, pero conocen el pueblo por todo lo que yo les he comentado y saben que es un municipio supersolidario. Queda pendiente que ellas puedan venir a visitarnos. Pero quiero destacar la labor de la Centuria Romana, porque sus acciones permiten visibilizar a Iznájar y también visibilizar las causas a las que se benefician. España es un país que destina muy pocos fondos a la investigación y creo que la visibilización de los problemas es muy importante.