27/07/2025


Actualizado a las 20:29h.

Si Chuck Lorre destaca por algo es por haber hecho reír a millones de personas con familias disfuncionales, vecinos raros y situaciones que solo podrían pasar en la televisión… o en Acción de Gracias. El creador detrás de éxitos como ‘The Big Bang Theory’, ‘Dos hombres y medio’ o ‘El joven Sheldon’ regresa con una nueva comedia bajo el brazo en Netflix: ‘Leanne’. Pero esta vez no viene solo. Le acompaña Leanne Morgan, humorista sureña con acento marcado, mirada dulce y una lengua tan afilada como sincera, que además de co-crear la serie, la protagoniza con el desparpajo que solo dan los años, los hijos… y un divorcio.

‘Leanne’ es una comedia que aterriza con ese estilo marca de la casa: situaciones cotidianas llevadas al extremo, diálogos rápidos, mucho corazón y, sobre todo, una ración generosa de carcajadas. Pero aquí el giro es claro: la voz femenina sureña de Leanne Morgan se impone como el alma del show. En un panorama de series cada vez más centradas en lo urbano y lo juvenil, esta ficción planta bandera en lo cotidiano, lo familiar y lo adulto, con una protagonista que no tiene veinte años ni va a terapia por moda, sino porque su marido la ha dejado por otra mujer. La historia arranca con ese punto de partida dolorosamente cómico: el abandono. Pero Leanne, lejos de venirse abajo, lo convierte en motor para reinventarse. Sin perder su dulzura ni su honestidad, esta madre, esposa y mujer hecha a sí misma intenta reconstruir su vida rodeada de una familia que la ama tanto como la vuelve loca. En ese equilibrio entre ternura y caos está el corazón de la serie.

Aunque el formato sigue el estilo clásico de comedias familiares, ‘Leanne’ se distancia de ellas con elementos peculiares: hay acento sureño, referencias culturales del sur de Estados Unidos, y una protagonista que no encaja en los moldes de la típica madre televisiva. Aquí hay menopausia, vino blanco y mucha sabiduría ganada a pulso. Chuck Lorre lo sabe, y por eso le cede espacio a una voz nueva que refresca el género sin perder su esencia.

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