Mañaneros 360 ha entrevistado este viernes a Isabel Pérez Moñino para preguntarle por qué Vox, el partido del que es portavoz, propone hundir el Open Arms, el barco que hace tareas de ayuda humanitaria en el Mar Mediterráneo. Se cumplía así con la “obligación de pluralidad” a la que está sometida TVE, según ha señalado el presentador del programa, Javier Ruiz, pero Pérez Moñino ha aprovechado esta intervención para acusar a su anfitrión de ser un “activista del Gobierno”.
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La entrevista ha sido tensa de principio a fin. “Ustedes desde estas tertulias hablan de ese buenismo y de esas políticas multiculturales, pero no pisan ustedes, ni los políticos que traen a esos inmigrantes ilegales, los barrios que están sufriendo las consecuencias de esa inmigración ilegal y descontrolada”, empezaba diciendo la portavoz nacional del partido ultraderechista.
“El Open Arms es un barco privado”, le recordaba Ruiz, de modo que “no gasta los recursos de los españoles”. Y además, el periodista de RTVE tachaba de “mentira” otro de los argumentos de Pérez Moñino, pues “la tasa de delincuencia está bajando a niveles históricos” a pesar de que “tenemos 3,3 millones de inmigrantes más en los últimos años”. “¿Están ustedes utilizando la inmigración para ganar votos?”, le preguntaba a su invitada.
La portavoz de Vox le respondía con un dato: “El 46% de la población reclusa de la Comunidad de Madrid es extranjera, cuando no supone ni el 20% de la población total”, pero a Ruiz tampoco le convencía esta afirmación: “Porque es población pobre, no porque sea población inmigrante. La delincuencia está siempre ligada a la pobreza”, defendía el presentador de Mañaneros 360.
Pérez Moñino optaba entonces –como ya había hecho al principio– por entrar en el terreno personal para desacreditar a su anfitrión. “Ustedes están haciendo de activistas del Gobierno. Nosotros venimos a defender la seguridad de los españoles, esa de la que se ríen ustedes”, le espetaba al presentador, que no se quedaba callado ante estos ataques personales. “Se lo digo a usted con todo el respeto, como se lo he dicho a otros portavoces. Yo tengo casi la obligación de entrevistarles a ustedes, que son la tercera fuerza política de este país. Yo les guardo un respeto que ustedes no me tienen nunca a mí. No termino de entender por qué usted me insulta y me falta. Yo le respeto incluso cuando estoy posicionado absolutamente en contra de lo que usted me está defendiendo, entre otras cosas porque las cifras no dicen lo que usted dice”, contestaba Ruiz.
Javier Ruiz a la portavoz de Vox: “Es muy difícil tener entrevistas e intentar escuchar sus argumentos”
La entrevistada no estaba dispuesta a abandonar el camino de la afrenta personal. “¿Usted es periodista, me está entrevistando a mí, o es un activista del Gobierno?”, añadía Pérez Moñino. Cansado del cuerpo a cuerpo, Ruiz insistía en que no era necesario centrar el debate en su papel como moderador: “A veces es muy difícil tener entrevistas e intentar escuchar sus argumentos. No convierta esto en una cuestión personal contra mí, se lo pido por favor”. Sin embargo, la portavoz de Vox tenía claros sus objetivos: “Tenemos que cesar ese efecto llamada que están favoreciendo ustedes desde tertulias subvencionadas, desde una televisión pública al servicio del Gobierno”.
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Segundos después terminaba la entrevista, algo que el presentador de Mañaneros 360, consciente de que la ultraderecha suele acosar a determinados periodistas, aprovechaba para hacer un recordatorio: “Voy a subrayar una cosa porque conozco su formación y luego nos señalan a algunos. Yo le he hecho preguntas y le he dado datos, en ningún momento le he faltado. Yo a usted no la he insultado, usted a mí sí. Mi obligación es escucharla y la obligación está cumplida. Gracias, cuídese un abrazo muy fuerte”, se despedía Javier Ruiz. “Gracias a la televisión pública de todos los españoles”, añadía la dirigente de Vox.