El protagonista de ‘No Other Choice’ –el nuevo thriller criminal del cineasta surcoreano Park Chan-wook– ha trabajado siempre en el seno de la industria papelera. Esta circunstancia permite al director de ‘Decision to Leave’ enmarcar su adaptación de la novela ‘The Ax’ de Donald E. Westlake –que ya fue llevada al cine en 2005 por Costa-Gavras, bajo el título de ‘Arcadia’– en unas interesantes coordenadas históricas, cinéfilas y filosóficas. Por un lado, la decreciente demanda de papel, en una era marcada por lo virtual-digital, permite comprender el despido que sufre el protagonista, Man-soo (interpretado por Lee Byung-hun), que se verá obligado a navegar la inclemente jungla del desempleo mientras ve cómo se derrumba el estatus económico de su familia.

no other choice

‘No Other Choice’ (Park Chan-wook, 2025)

Por otra parte, Park aprovecha el motivo visual de la gigantesca maquinaria de las empresas papeleras, con sus enormes rollos y sus grúas mastodónticas, para manifestar su preocupación acerca de la creciente deshumanización del mundo contemporáneo. Aunque cabe señalar que esta idea no es nueva. Si tiramos de memoria cinéfila, resulta inevitable pensar en el referente totémico de ‘Tiempos modernos’, la película de 1936 en la que Charles Chaplin denunció hasta qué punto el “progreso” estaba alejando a los individuos de su capacidad primigenia de experimentar la empatía, la ternura, la compasión…

no other choice

‘No Other Choice’ (Park Chan-wook, 2025)

En ‘No Other Choice’, Park resigue la estela de Chaplin, pero lo hace desde postulados casi opuestos. Mientras Chaplin abrazaba un humanismo cargado de emoción, Park decide abordar la crisis de valores del mundo moderno desde una oscuridad que colinda con el nihilismo. Y es que, ante la imposibilidad de hallar trabajo, Man-soo toma una decisión salvaje: asesinar a aquellos colegas de gremio que podrían competirle las ofertas de trabajo. Esta premisa brutal, que remite a la máxima de Thomas Hobbes de que “el hombre es un lobo para el hombre”, conecta ‘No Other Choice’ con las películas más bárbaras y crueles de Park, sobre todo su Trilogía de la Venganza. Lejos del romanticismo trágico de ‘Decision to Leave’ o de los juegos de perspectivas de ‘La doncella’, ‘No Other Choice’ despliega su sórdido relato en orden cronológico, resiguiendo la peripecia homicida de Man-soo con el dinamismo y detallismo habituales en la obra de Park.

no other choice park chan wook festival venecia 2025

‘No Other Choice’ (Park Chan-wook, 2025)

No hay duda de que la cruenta aventura de ‘No Other Choice’ le viene como anillo al dedo a un Park deseoso de afilar su mirada social y su vocación de cineasta popular, algo que se ve acrecentado por la enérgica apelación a la comedia satírica. Hacía tiempo que Park no exploraba los mecanismos del humor –lo hizo en ‘Soy un cyborg’, su película de 2006–, y en ‘No Other Choice’ se entrega a ello con determinación. Este talante paródico se manifiesta ya en la presentación inicial de la existencia burguesa del protagonista, en un comentario de clase (social) que invita a relacionar ‘No Other Choice’ con ‘Parásitos’ de Bong Joon-ho. Y, luego, el humor vuelve a estallar en unas escenas de acción en las que la inexperiencia homicida del protagonista hace aflorar un patetismo hilarante. La colección de asesinatos se asienta sobre unas coordenadas ridículas, en la línea del cine de la idiotez de los hermanos Coen, y cuando parece que el horror extremo va a aniquilar cualquier posibilidad cómica, Park se encarga de introducir algún componente grotesco que reactiva la sátira.

no other choice

‘No Other Choice’ (Park Chan-wook, 2025)

‘No Other Choice’, con su apuesta por la comedia negra pasada de vueltas, se presenta ante el espectador como un juego perverso y sugerente. Una invitación al entretenimiento y a la experiencia de una cierta incomodidad que se redobla cuando observamos la curiosa complicidad que Park establece con su protagonista. Sin miedo a navegar por la cuerda floja de la ambigüedad moral, ‘No Other Choice’ instiga al espectador a vivir con excitación el proceso de empoderamiento de Man-soo. Esto tampoco es nada nuevo. Martin Scorsese sublimó este mecanismo dramatúrgico en ‘Taxi Driver’; de hecho, en una escena de ‘No Other Choice’, el protagonista, tal y como le gustaba hacer a Travis Bickle (Robert De Niro), se detiene frente a un espejo para sopesar su creciente energía masculina. Y qué decir de la epopeya criminal de Walter White (Bryan Cranston) en ‘Breaking Bad’, con su magnético y lúgubre proceso de autodescubrimiento. Estos referentes palpitan en los terribles lances que atraviesa Man-soo y su familia, unas andanzas tragicómicas en las que Park exhibe con orgullo su cara más misantrópica.

Para observar la inhumanidad del mundo moderno desde una perspectiva tragicómica

Lo mejor: El retrato salvaje de una masculinidad tóxica.

Lo peor: La ambigüedad moral con la que juega Park Chan-wook.

no other choice

‘No Other Choice’ (Park Chan-wook, 2025)

Ficha técnica

Dirección: Park Chan-wook Reparto: Lee Byung-hun, Son Ye-jin, Park Hee-soon, Lee Sung-min, Yeom Hye-ran, Cha Seung-won País: Corea del Sur Año: 2025 Fecha de estreno: 20‑03‑2026 Género: Thriller. Comedia. Drama Guion: Park Chan-wook, Don McKellar, Lee Kyoung-mi, Jahye Lee (Novela: Donald E. Westlake) Duración: 139 min.

Sinopsis: Después de estar desempleado durante varios años, un hombre diseña un plan único para conseguir un nuevo trabajo: eliminar a su competencia.

Headshot of Manu Yáñez

Manu Yáñez es periodista y crítico de cine y está especializado en cine de autor, en su acepción más amplia. De chaval, tenía las paredes de su habitación engalanadas con pósteres de ‘Star Wars: Una nueva esperanza’ de George Lucas y ‘Regreso a Howards End’ de James Ivory, mientras que hoy decora su apartamento con afiches de los festivales de Cannes y Venecia, a los que acude desde 2003. De hecho, su pasión por la crónica de festivales le cambió la vida cuando, en 2005, recibió el encargo de cubrir la Mostra italiana para la revista Fotogramas. Desde entonces, ha podido entrevistar, siempre para “La primera revista de cine”, a mitos como Clint Eastwood, Martin Scorsese, Angelina Jolie, Quentin Tarantino y Timotheé Chalamet, entre otros.

Manu es Ingeniero Industrial por la Universitat Politécnica de Catalunya, además de Máster en Estudios de Cine y doctorando en Comunicación por la Universitat Pompeu Fabra. Además de sus críticas, crónicas y entrevistas para Fotogramas, publica en El Cultural, el Diari Ara, Otros Cines Europa (escribiendo y conduciendo el podcast de la web), la revista neoyorkina Film Comment y la colombiana Kinetoscopio, entre otros medios. En 2012, publicó la antología crítica ‘La mirada americana: 50 años de Film Comment’ y ha participado en monografías sobre Claire Denis, Paul Schrader o R.W. Fassbinder, entre otros. Además de escribir, comparte su pasión cinéfila con los alumnos y alumnas de las asignaturas de Análisis Fílmico de la ESCAC, la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña. Es miembro de la ACCEC (Asociación Catalana de la Crítica y la Escritura Cinematográfica) y de FIPRESCI (Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica), y ha sido jurado en los festivales de Mar del Plata, Linz, Gijón, Sitges y el DocsBarcelona, entre otros. 

En el ámbito de la crítica, sus dioses son Manny Farber, Jonathan Rosenbaum y Kent Jones. Sus directores favoritos, de entre los vivos, son Richard Linklater, Terence Davies y Apichatpong Weerasethakul, y su pudiera revivir a otros tres serían Yasujirō Ozu, John Cassavetes y Pier Paolo Pasolini. Es un culé empedernido, está enamorado de Laura desde los seis años, y es el padre de Gala y Pau.