Redacción
El virus respiratorio sincitial (VRS) es la infección respiratoria más común en la infancia y una de las principales amenazas para la salud de los recién nacidos. Se estima que hasta el 90% de los niños se infectan durante los dos primeros años de vida, y en los casos más graves puede requerir hospitalización, cuidados intensivos o incluso ser letal.
En España, el VRS causa cada año entre 7.000 y 14.000 hospitalizaciones en menores de 2 años, con picos de contagio entre finales de otoño e invierno. Ante esta situación, el Dr. Santiago Novoa, ginecólogo de Policlínica Gipuzkoa, recuerda que ya existen medidas preventivas eficaces para proteger a los más pequeños. «Disponemos de dos estrategias: la vacunación de las embarazadas entre las semanas 24 y 36 con la vacuna Abrysvo, que transfiere anticuerpos al bebé a través de la placenta, y la inmunización directa del recién nacido con nirsevimab».
Con la llegada de septiembre, se inicia la recomendación de vacunación frente al VRS durante el embarazo. Entre septiembre y enero se aconseja administrar Abrysvo a las embarazadas, mientras que entre octubre y marzo se recomienda proteger directamente a los recién nacidos con nirsevimab.
Protección desde el primer día de vida
Aunque la mayoría de las mujeres han estado expuestas al VRS en la infancia, los anticuerpos adquiridos de forma natural no son suficientes para proteger al bebé. “Administrar la vacuna a la madre durante el embarazo aumenta sus niveles de anticuerpos y estos se transmiten al feto. Así conseguimos que el recién nacido esté protegido desde el primer día de vida, reduciendo hasta en un 70% el riesgo de bronquiolitis grave durante sus primeros seis meses”, explica Novoa.
En los casos de parto prematuro, cuando no han pasado 14 días desde la vacunación materna, o en bebés de mayor riesgo (prematuros, con cardiopatías o inmunodeficiencias), también se recomienda administrar nirsevimab para garantizar una protección adecuada.
Situación en España
Aunque la vacuna frente al VRS está aprobada en España, todavía no forma parte del calendario oficial de vacunación en embarazadas. Sin embargo, desde consultas de ginecología y pediatría, las madres pueden informarse y decidir junto a su especialista la mejor estrategia para proteger a sus hijos. «Vacunarse es prevenir, y prevenir siempre es la mejor decisión cuando hablamos de la salud de un recién nacido», concluye el Dr. Novoa.