Lo más sorprendente de la elección de Jon Rahm para el equipo europeo que disputará la próxima Ryder Cup en Bethpage Black (Nueva York, EE UU) del 26 al 28 de este mes, en lo deportivo un secreto a voces, no tiene nada que ver con el golf; tiene que ver con… Star Wars.
Porque el vizcaíno dejó el momento cómico de la retransmisión en la que se anunciaron los picks de Luke Donald el lunes pasado. Ocurrió cuando el conductor del evento, el periodista Nick Dougherty, avistó en el plano que mostraba la sala de trofeos de Rahmbo, desde donde este daba sus impresiones tras saberse escogido, una ilustración de Baby Yoda, el nombre coloquial con el que ha pasado a la historia televisiva Groku, el personaje más simpático de la serie The Mandalorian.
“Hay un gran fan de Star Wars aquí hoy”, soltó entre risas Rahm al ser preguntado por la imagen, que ocupa un lugar destacado entre un montaje fotográfico con el y Seve Ballesteros estrechándose la mano y algunos de los grandes trofeos que ha conquistado en cu carrera. “Que la fuerza te acompañe en Bethpage”, recogió el guante Dougherty.
Pero lo mejor vino en la rueda de prensa que ofreció posteriormente Rahm, en la que hizo unos comentarios poco canónicos sobre la afamada saga, por decirlo de alguna manera, que han tenido repercusión incluso entre la prensa especializada estadounidense. “Empecé cuando era pequeño. A diferencia de muchos fans, como era lo suficientemente joven y ‘viejo’ a la vez, mi primera introducción a la saga fue La amenaza fantasma, que para los más radicales quizá no sea la mejor forma de empezar. Era joven, y ver la segunda trilogía, los episodios del 1 al 3, las luchas con espada láser, fue lo que me metió de lleno en el tema antes incluso de entenderlo», aseguró, en una admisión cuanto menos valiente.
Aunque lo más controvertido estaba por llegar. “Mi personaje favorito era uno que quizá no está entre los más queridos, Jar Jar Binks. Era un niño y ese personaje es realmente gracioso”, lanzó ni corto ni perezoso, sin miedo a convertirse en el saco de boxeo de la facción más ortodoxa de este mundillo. “Durante el COVID le hice a Kelley (Cahill, su mujer) tragarse todas. Vimos la última trilogía de Disney y pude apreciar más la primera de todas. Pero siempre voy a estar un poco condicionado hacia la segunda, que es por la que me metí en esto”, remató en una aproximación a la creación de George Lucas que desde luego no deja claro si está en el lado correcto de la fuerza.
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